La Federación Argentina de Municipios (FAM) es por estos días el botín más codiciado -tanto para la alianza Cambiemos como para el FpV-, ya que esta última coalición perdió las elecciones en la Provincia de Buenos Aires y, para volver a ejercer la Gobernación, debe empezar a construir su propuesta desde la célula base de su poder territorial, que son, precisamente, los municipios.
En medio de este panorama, intendentes peronistas de todo el país se reunieron el 11 y 12 de mayo últimos en Concordia (Entre Ríos) y definieron a su candidato para la FAM bonaerense, en un marco de creciente descontento con el Gobierno nacional, que suspendió todas las obras que estaban en marcha en sus jurisdicciones. Además emitieron un crítico documento que incluyó temas de la política nacional y de Latinoamérica.
Los intendentes expresaron sus principales preocupaciones, de las que se pueden extraer las siguientes:
– Condenamos los despidos masivos en el sector público realizados por el gobierno nacional y apoyamos el tratamiento de la Ley Antidespidos para que se pueda frenar la disminución de la planta de personal de las empresas que ocurre desde diciembre hasta la fecha”.
– Preocupación por las medidas de política económica tomadas desde el 10 de diciembre en adelante, a partir de la mega devaluación, los tarifazos en los servicios públicos, transporte, combustibles y su incidencia en los precios de los bienes y servicios, acelerando la inflación a niveles insostenibles en el tiempo, superando ampliamente las posibilidades de recuperación del salario, a través de las paritarias”.
– También sentimos que en nuestra América del Sur se ha iniciado una etapa de naturalización de los golpes institucionales “blandos”, tal el caso de Dilma Roussef en Brasil, que con la judicialización de la política y el apoyo de los medios hegemónicos, de los sectores concentrados de la economía y del poder financiero internacional consiguen por otros medios lo que había logrado el pueblo con su voto, todo además “ocultado” por los grandes medios de difusión tanto en nuestro país, como en el propio Brasil”.
Hoy por hoy, el presidente de la organización es el peronista Julio Pereyra, intendente de Florecio Varela y referente del municipalismo de ese signo. La FAM tiene filiales en cada provincia y en la más importante, la de Buenos Aires, su presidente es Alberto Descalzo, jefe comunal de Ituzaingó, en el oeste bonaerense. En este sentido, el Bloque Federal de Intendentes Justicialistas designó al alcalde de Bolívar, Eduardo “Bali” Bucca, para liderar la pelea por su sucesión, que se dará hacia fin de año.
Para sorpresa de quienes observan la situación, de Concordia no surgió el aspirante a suceder a Pereyra. Esta carencia significaría que existe una negociación con el Gobierno nacional. Inclusive, el ministro del Interior, Rogelio Frigerio y algún otro funcionario de su cartera admitieron que sostienen un diálogo permanente con los intendentes peronistas de todo el país y dejaron caer los nombres de Pereyra y de Bucca entre los de sus interlocutores.
De todos modos, el foro de Intendentes bonaerenses de Cambiemos será el árbitro en esta contienda, habida cuenta de que ostentan la mayoría en la suma de las intendencias de la provincia (64, contra 55 del FpV), que les alcanzaría para desplazar al Justicialismo de ese lugar. Su candidato a presidir la FAM provincial podría estar entre el intendente de San Cayetano, Miguel Ángel Gargaglione (UCR) o algún intendente surgido del Pro, que podría ser Jorge Macri (Vicente López); Nicolás Ducoté (Pilar) o Ramiro Tagliaferro (Morón), que son los nombres que lanzó al ruedo Lucas Delfino, subsecretario de Políticas Municipales de la Nación, que responde directamente del Ministro del Interior, Rogelio Frigerio.
En cuanto al orden nacional, allí el Gobierno fluctúa entre la necesidad de adjudicarle la FAM a uno de los suyos -si ésto fuera así, el favorecido sería el primo presidencial, Jorge Macri, intendente de Vicente López- o favorecer a sus aliados radicales, que son, dentro de su alianza, detentan el poder en más municipios. En este caso, el favorecido sería el radical cordobés Ramón Mestre. Pero existe una variante, que en los últimos tiempos viene ganando terreno dentro del oficialismo nacional. Si la urgencia por ganar el sillón principal del Cambiemos fuera ineludible, la única manera de superar al peronismo sería buscando una alianza con el massismo, lo que los llevaría a ofrecérselo al intendente salteño Gustavo Sáenz, ya que los números no cerrarían sin el apoyo de la fuerza que encabeza el tigrense.
De todos modos, en la Casa Rosada la lectura es que la candidatura de Bucca a la FAM bonaerense por el FpV sería una señal de retirada de parte de éstos del ámbito nacional de la organización que agrupa a los municipios. Ergo, la presidencia del organismo estará al alcance de sus manos. Por esta razón, su postulante cotiza cada vez más alto en la bolsa de valores de la política y esta circunstancia elevaría fuertemente el voltaje de la competencia dentro de las filas de Cambiemos.
Tanto Karl Von Clausewitz como Sun Tzu, dos de los más respetados teóricos de la guerra, sostuvieron que la mejor batalla es aquella en que el general vence sin que sus tropas entren en combate, a causa de que su posición se ha vuelto tan ventajosa que su enemigo abandona la lid, convencido de que la derrota será su único destino. Volviendo a la Argentina de hoy, los contendientes observan los movimientos de sus adversarios, tratan de adelanterse a su estrategia y esperan el momento para ubicar a sus hombres en los espacios más ventajosos. El tiempo dirá, pero es probable que el camino, más que el del belicismo, sea el de la negociación.
