En lo que va del año, para los porteños, la inflación acumula un aumento del 11,2 por ciento. El dato surge del último relevamiento de la Dirección de Estadística y Censos del Gobierno de la Ciudad, que en el mes de junio detectó un ajuste del 1,4 por ciento. Como positivo, puede marcarse que en comparación con el mismo mes, pero de 2014, este número bajó un 0,6 por ciento.
Estos incrementos, según el informe, estuvieron “impulsados mayormente por subas en los cigarrillos, prendas de vestir y calzado, vehículos automotores y, en menor medida, el encarecimiento de los productos lácteos y huevos, artículos de tocador, belleza y descartables, y combustibles y lubricantes. Por otro lado, los precios de las verduras frescas disminuyeron en el mes, contrarrestando parcialmente los aumentos mencionados”.
Por su parte, “los servicios registraron una suba de 1,1%, con fuerte incidencia de los aumentos en las cuotas de los servicios de medicina prepaga y en los alquileres de la vivienda. También influyeron en igual sentido los aumentos en la educación formal, los gastos comunes de la vivienda, los estacionamientos porteños y el gas por red”.
