La ex vicejefa de Gobierno y actual diputada nacional por la ciudad de Buenos Aires, Gabriela Michetti, festejó su cumpleaños número cuarenta y tantos con una concurrida fiesta, en la que ofició de anfitriona de unos 70 invitados que arrasaron con las existencias de comida mexicana y con una muy elogiada cazuela de arroz con champignones.
Estuvieron presentes, entre otros, Mauricio Macri y su esposa, Juliana Awada y los ministros Diego Santilli, de Ambiente y Espacio Público; Guillermo Montenegro, de Seguridad, y de Gobierno Emilio Monzó, que no desmaya en su difícil tarea de construir la opción Michetti 2015 en la Provincia de Buenos Aires.
También fueron de la partida los colegas del bloque PRO de la homenajeada en el Congreso nacional Federico Pinedo, Pablo Tonelli y Eduardo Amadeo ?que concurrió al ágape acompañado por su esposa, la ex presidenta del Consejo de Niños, Niñas y Adolescentes del gobierno porteño, Beatriz Orlowsky.
Junto a ellos llegó ?para recordar viejos tiempos- la ex diputada aún radical, Silvana Giúdici, que supo cultivar un fuerte lazo con Michetti, que habilitó algunos escarceos con el PRO de la mano de ésta. Otra representante del Congreso con ganas de saltar hacia el PRO de la mano de Michetti que también concurrió a la casa de San Cristóbal fue Patricia Bullrich, la antigua ladera de Lilita Carrió que por ahora forma parte del bloque unipersonal Unión por Todos.
Hubo además una profusa delegación de la Legislatura porteña, que estuvo encabezada por los legisladores porteños en ejercicio de su mandato Alejandro García, Lidia Saya, Rogelio Frigerio, Fernando de Andreis y por Martín Borrelli, que ya terminó su período como legislador.
Entre los funcionarios aposentados en Bolívar 1 que concurrieron al evento se pudo divisar al secretario general Marcos Peña, antiguamente uno de los más cercanos a Michetti, aunque por estos días esa cercanía ya no sea la misma. Junto con él, estuvieron el responsable de Unidad de Coordinación del Plan Estratégico, Rodrigo Herrera Bravo; el presidente del Corporación Buenos Aires Sur, Humberto Schiavoni; el director de Industrias Creativas, Enrique Avogadro; la secretaria de Hábitat e Inclusión, Marina Klemensiewicz; su marido Iván Pavlovsky, eterno vocero de Mauricio Macri y el responsable de la Unidad de Proyectos Especiales del Sistema de Medios Públicos, Carlos Ares.
En la amena tertulia, hubo dos temas que opacaron a todos los demás. El primero fue la nota que publicó el diario La Nación, en la que Marcos Aguinis le reprochó ?como ya lo hizo otras veces- a la oposición por su dispersión frente al proyecto que encabeza Cristina Fernández de Kirchner y la respuesta, que publicó el mismo medio, que firmaron Federico Pinedo, Eduardo Amadeo y Patricia Bullrich, destacando los logros opositores y convocando a formar parte de un nuevo proyecto político al propio Aguinis, un escritor que alguna vez fue funcionario del gobierno de Raúl Alfonsín.
Pero el tema político que opacó a todos los demás fue la evaluación que hicieron los presentes sobre el voto favorable de un sector del PRO bonaerense al revalúo rural inmobiliario que aprobó el jueves último la Legislatura de la Provincia de Buenos Aires.
En esa ocasión, los diputados provinciales del PRO-Peronismo Marcelo Di Pasquale ?presidente de la bancada, que cuenta con once miembros-, Nancy Monzón, Wellington Jorge Alves y Orlando Yans votaron favorablemente el proyecto enviado por el gobernador Daniel Scioli, desatando la ira de la conducción nacional del PRO.
Las fuentes consultadas por Noticias Urbanas relataron que no habrá mucho que reclamarle a Di Pasquale, que es peronista y no del PRO, pero Nancy Monzón está con Macri hace muchos años y trabajó en el Grupo Socma, en tanto que Jorge Alves fue el secretario privado de Macri cuando era presidente de Boca Juniors. Orlando Yans, por su parte, es un ex radical, hombre de Daniel Angelici y, por lo tanto, integrante del riñón del poder PRO.
Para la mayoría de los presentes, el futuro de los insurrectos debería estar lejos del PRO, en tanto que otros, más moderados, sugerían que primero habría que saber qué pasó en la noche del jueves, cuando todos los gatos fueron pardos y la confusión y el desconcierto se enseñorearon en el bloque del PRO-Peronismo.
Mauricio Macri aseguró que él, en lo personal, no ordenó votar a favor de un proyecto que despertó la oposición de su partido desde el primer momento. De todos modos, el jefe de Gobierno porteño no ocultó su desagrado por el hecho, por lo que la suerte de los indómitos estaría echada, aunque existen gestiones para conseguirles una amnistía.
Finalmente, llegaron los mariachis, que con su música lograron calmar a los furiosos y alegrar los espíritus, logrando que la fiesta terminara como comenzó: con todos en paz y armonía, entre sonrisas.
