Segundo veto 2013

Segundo veto 2013

El jefe de Gobierno rechazó la ley de fábricas recuperadas, aprobada en la Legislatura en diciembre pasado. Juan Cabandié y trabajadores salieron al cruce de la decisión.


La gestión de Mauricio Macri en la Ciudad, caracterizada desde un comienzo, por la cantidad de vetos parciales o totales a las distintas leyes aprobadas, amplía su número en 2013. Hace una semana,  el jefe de Gobierno bajó el pulgar a la norma de la protección de especies y ahora se suma la iniciativa de las fábricas recuperadas (ley 4.552).  Esta iniciativa fue presentada por el legislador Juan Cabandié, en representación del Movimiento de Fábricas Recuperadas de la Ciudad.

Luis Alberto Caro, autor del proyecto, expresó en diálogo con Página 12 que -esta iniciativa aprobada por unanimidad en la Legislatura el 13 de diciembre pasado aunque nunca publicada- “esta es la segunda vez que el Ejecutivo rechaza una ley que le da un marco de protección a una treintena de empresas recuperadas”.

Después de que hace once años, la empresa Ghelco comenzara el camino de expropiación, muchos trabajadores tomaron la decisión de seguir por igual vía y las leyes para que los medios de producción quedasen en manos de los trabajadores, se multiplicaron.

Caro explicó que en 2004 “se aprobó la ley marco 1.529” que “cada tres años cae” y relató que se prorrogó dos veces, pero la tercera (en 2011) y la cuarta vez (en 2012), fue vetada. Es que la ley que el Ejecutivo decidió frenar extendía por seis años más la vigencia de la ley marco aprobada en un primer momento.

Cabandié se expresó a través de las redes sociales y previa publicación en Página 12, afirmó que habrá “vetocracia versión 2013“. En igual sentido, Gabriel Rojas, síndico de la Cooperativa Gráfica Patricios, manifestó que “solamente toma medidas de derecha para llevar adelante su gestión”.

El trabajador explicó que la medida perjudica a “70 familias” en forma directa “más unas 300 personas que están afectadas al polo solidario que funciona para toda la comunidad y en diversas ramas como la salud, la educación y la comunicación”. Rojas recordó que en donde hoy funciona la cooperativa “en otras épocas trabajaban 400 familias”, luego con la crisis de 2001 “quedaron 27”, pero “a partir de ahí empezó a crecer hasta las 70 familias actualmente trabajando”.

“No tiene una salida y solamente toma medidas de derecha para llevar adelante su gestión. Toda persona que viva de un sueldo es un enemigo de él”, agregó.

 

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