El empresario Pedro Etchebest, que primero fue extorsionado por elementos ligados a la Justicia y luego fue acusado por la legisladora de Cambiemos al Parlasur Mariana Zuvic de haber sido detenido por proxeneta en una causa judicial, denunció a ésta por “calumnias e injurias”.
La abogada Natalia Salvo, representante del empresario agropecuario, publicó en las redes la demanda y acusó a la legisladora porque “mancillar el honor de las personas no puede quedar impune, sobre todo si con ello se apunta a desacreditar una investigación de gravedad institucional”.
Etchebest saltó a la notoriedad cuando denunció una extorsión contra su persona por parte de Marcelo D’Alessio, que se presentó como un emisario del fiscal federal Carlos Stornelli, desatando un escándalo de grandes proporciones.
La letrada patrocinante de Etchebest relató que “mi cliente fue citado por una causa en Mar del Plata por reducción a la servidumbre en un campo del que es dueño, pero lo tenía alquilado y al presentar el contrato de locación se le dictó automáticamente la falta de mérito”.
La abogada denunció que la denuncia de Zuvic sólo intentó atacar a su defendido para que su denuncia se caiga, porque por más que “fueran ciertas las acusaciones” contra Etchebest. “Intenta embarrar la cancha”, alegó.
Sobre la causa, cuya investigación sigue en curso, Salvo afirmó que “los chats entre D’Alessio y Etchebest ya están acreditados”, en tanto que coligió que el juez federal de Comodoro Py Julián “Ercolini le solicitó la causa a Ramos Padilla, en una clara maniobra para apropiársela, porque lo hizo sin siquiera conocer el contenido, ya que está en secreto de sumario”.
Para el archivo y para el recuerdo quedará una frase que profirió la blonda diputada chaqueña -y mentora de Zuvic- Lilita Carrió, que advirtió que “yo les digo a todos ustedes: tocan a Mariana (Zuvik) o la tocan a Paula (Oliveto) y yo digo que son ustedes. Cristina y compañía, La Cámpora completa, Rudy Ulloa, Baratta, Etchegaray”, en plan sicaria, digna émula de Jhon Jairo Velásquez, alias “Popeye”, su colega oficial de Pablo Escobar.
