El juez Darío Reynoso, al frente del Juzgado en lo Contencioso, Administrativo y Tributario N° 24, dio lugar al recurso de amparo presentado por el legislador porteño Marcelo Ramal (FIT) y suspendió el aumento de la tasa de acarreo que había entrado en vigencia el lunes.
El gobierno porteño había llevado el costo del acarreo de $ 460 a $ 580 (un aumento del 29%). Se trata del cuarto incremento que autoriza la gestión de Mauricio Macri. Según la resolución publicada en el Boletín oficial, con la medida se buscaba seguir desalentando el uso del automóvil particular en la zona céntrica de la Ciudad, y además respondía al pedido de las empresas concesionarias del servicio de actualizar la tarifa “ante la imperiosa necesidad de restablecer la ecuación económico-financiera para hacer viable la actividad realizada”. El detalles que las empresas STO y SEC trabajan desde hace 13 años con contrato vencido, apenas pagan $ 30.000 de canon y que recaudan varios millones de pesos mensuales.
“Entre los fundamentos de nuestro planteo decimos que se trata de un aumento abusivo de la tasa de acarreo, que sumado a los aumentos anteriores trasnforma esta tasa en una multa encubierta, con el agravante de que es percibida íntegramente por un concesionario privado que además tiene el contrato vencido”, destacó Ramal.