La aerolínea norteamericana emitió un comunicado para aclarar lo sucedido: “El vuelo 909 de American del lunes 11 de julio, de Miami a Buenos Aires, una aeronave Boeing 777-200, salió con un retraso de 17 minutos. El vuelo salió a la 20.17 y aterrizó en Buenos Aires (Ezeiza) a las 6:02 (cuatro minutos después de la hora programada). Un pasajero a bordo decidió no viajar al último momento; aún no conocemos la razón”.
El vuelo estaba pautado para salir el pasado lunes a las 20 de Miami, Estados Unidos, hacia el aeropuerto de Ezeiza. Algunos pasajeros comenzaron a inquietarse cuando se acercaba la hora de despegue al ver que el avión estaba casi vacío y que no había indicios de que la salida se realizara a horario.
“Cuando estábamos en vuelo el comandante de abordo menciona en un mensaje a través del megáfono algo en relación a ‘la piloto y la copiloto'”, señaló Marcos, pasajero de ese vuelo. “Ahí nos dimos cuenta de que eran mujeres y la gente se sorprendió”, agregó.
“El vuelo continuó normalmente y después uno de los tripulantes de cabina, de habla-hispana, me comentó que cuando siete pasajeros se enteraron de que la piloto y la copiloto eran mujeres, se quisieron bajar, hubo que sacar sus valijas y eso demoró una hora y media la salida del vuelo”, comentó Marcos, con una mezcla de indignación y sorpresa.
Así, el avión llegó en el horario preestablecido a Buenos Aires sin mayores sobresaltos que la baja de siete pasajeros.