Polémica con Cerruti por una foto de una planta de marihuana

Polémica con Cerruti por una foto de una planta de marihuana

La legisladora subió una imagen en Twitter en la que mostraba dos de las macetas que tiene en su casa. La polémica comenzó cuando sus seguidores repararon que era una planta de marihuana


En la noche del martes, la legisladora de Nuevo Encuentro, Gabriela Cerruti publicó una foto en su cuenta de Twitter, en la que aparecían dos macetas: una era un jazmín, mientras que la segunda despertó la polémica, ya que es de una planta de marihuana. Ante la pregunta de un usuario sobre si tuvo que tirarla por ser ilegal, la diputada replicó ¿”Quién dijo que lo es”?.

La representante del partido de Martín Sabbatella acompañó su relato indicando que “una me la regaló mi mamá y la otra @AlexFreyre (conocido militante por el matrimonio igualitario y la despenalización de drogas para consumo personal)”. “Adivinen”, desafió.

Con el paro que tuyo lugar en toda la jornada de ayer el asunto quedó en el tintero hasta que, este miércoles, la legisladora de Nuevo Encuentro volvió a publicar el mensaje con la misma foto y le contestó: “¿Quién te dijo que es ilegal?”. Ante esto, el usuario le recordó: “Lo dice el art. 5 de la ley 23.737 ¿se derogó y me lo perdí?”, agregó.

Por su parte, el periodista de C5N y Radio 10, Eduardo Feinmann, expresó que “Cerruti dice que soy un enano fascista, pero lo que ella hizo en su cuenta de twitter es una barbaridad. Publicó una foto de dos plantitas de marihuana, dice que una se la regaló Alex Freire, me parece que un funcionario público tiene que dar el ejemplo, y esto es un mal ejemplo para los jóvenes”.

Y agregó: “Según Zaffaroni tener una plantita no es delito, pero podría ser considerado delito publicar las plantitas, porque eso podría ser considerado apología”.

La diputada respondió: “Feinmann se enoja porque le digo fascista, pero después se escandaliza por una foto. ¡Andá!”.

Desde otras cuentas de la popular red social, en cambio, optaron por respaldar a la diputada porteña. “Es como emborracharse en casa o en salida con amigos, dejar el auto, y tomarse un taxi. Es un acto de la vida privada”, justificó uno de ellos.

 


Y otros eligieron tomárselo con humor. “¡Tu mamá fuma marihuana! ¡Qué bárbaro!” o bien “¡Cuando florezca invitanos! Adiviná cuál te digo”.

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