Aunque este fin de semana no se unieron a la iniciativa de cerrar sus puertas como lo hicieron los bares y boliches, por orden del jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, los casinos y el hipódromo de la Ciudad de Buenos Aires están cerrados a raíz de las nuevas medidas de restricción para la afluencia de personas a los establecimientos.
“Ya están cerrados. Todo el sistema de entretenimiento y de eventos culturales cerró desde ayer”, señaló el titular del Poder Ejecutivo de la Ciudad al ser consultado sobre las casas de juego.
Horacio Rodríguez Larreta admitió que, durante este último fin de semana, las empresas con locales de juegos de azar estuvieron abiertas, ya que “tenían la misma restricción con un límite de 200 personas” por establecimiento. “Eso, desde ayer, se cortó”, precisó el jefe de Gobierno porteño en diálogo con radio Mitre.
En medio de las medidas para desalentar la concentración de personas, el sector de las casas de juego de la Capital Federal había permanecido inmune al coronavirus. Siguieron funcionando en los últimos días, con sus horarios habituales.
Esta habilitación de hecho había llamado la atención ya que se trata de lugares cerrados, sin la ventilación adecuada, y donde su público preferencial son los adultos mayores, uno de los grupos de riesgo que debería adoptar prevenciones especiales ante el avance de la pandemia, según las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y de los especialistas en salud.
Hasta el lunes, y pese que ya se habían incrementado las medidas preventivas para evitar la propagación de la enfermedad, las salas de juegos volvieron a evitar la cuarentena y recibieron a cientos de apostadores.
En contraste, el gobierno de la Provincia de Buenos Aires ya había prohibido los días anteriores la actividad en bingos y casinos sin esperar la reunión de este lunes que se mantuvo en Casa de Gobierno. Además, varios municipios se mostraron activos durante el fin de semana para evitar grandes concentraciones de clientes de bingos.