Las chicas de "Bailando por un sueño 2007" ensayan con un entusiasmo digno de otras causas (no necesariamente mejores) agarrarse del caño y bailar, y según se dice en los pasillos, todas tienen lo suyo. A no dudarlo.
Los espectadores, telespectadores, maridos, novios, falsos novios, seductores caídos en desgracia y otras especies están esperando como mártires la condena de verlas bajando y subiendo, bajando y subiendo por el caño, que sin metáforas explícitas, explica tanta adhesión al "poledancing", el "baile del caño".
El "baile del caño" está haciendo furor pero no parecer una stripper, cuando no se es una stripper sino una aspirante (con suerte), puede costarles todos los apelativos y guarangadas, siempre renovadas, del plateísta. Así que en eso están las candidatas: en mejorar la performance.
Las estrellas de Holywood lo utilizan para estar en forma desde hace años: el "poledancing" es un ejercicio que combina estiramientos, destreza acrobática y calentamiento (de los espectadores) y de los músculos de las artistas.
Es que el corazón es un músculo sensible, casi tanto como el pene, que no es músculo, pero lo parece, de cabo a rabo.
