El ministro de Educación de la Ciudad, Esteban Bullrich, se mostró sorprendido al conocer la noticia de que, desde 2015, la provincia de Buenos Aires eliminará los aplazos y boletines, para sustituirlos por una “libreta de trayectoria”.
“Me parece que estamos yendo a contramano”, consideró Bullrich al ser consultado sobre la iniciativa. Según el ministro de Mauricio Macri, el gobierno nacional propone defender la escuela pública pero “hace todo para destruirla”. “Si no reconocemos que nos va mal, no reconocemos los problemas”, valoró.
“En educación no hay izquierda o derecha. Acá queremos que los chicos sepan lo que tienen que saber para que sean mejores que la generación que pasó”, explicó Bullrich. Por lo que consideró: “Estigmatizar es que los chicos lleguen al secundario sin saber leer, sin saber matemática y que por eso terminen abandonando en primer o segundo año. No un uno, un dos o un tres”.
“Tenemos que hacernos cargo de que la mala calidad educativa es responsabilidad de la dirigencia política”, indicó el titular de la cartera educativa porteña y comparó: “La mitad de los chicos no llegan a terminar el secundario. Si Recalde estrellara la mitad de los aviones, duraría 30 segundos. Nosostros, en cambio, seguimos siendo ministros. ¿Por qué? Porque los padres no lo saben”.
Desde la oposición, también otros representantes salieron al cruce de la medida.
