La reforma educativa impulsada por la provincia de Buenos Aires que pone fin a los aplazos desató una ola de declaraciones por parte de dirigentes opositores y recibió el respaldo del Gobierno nacional que, a su vez, pide revisar la instancia de examen y la repitencia.
Según el secretario general de UDOCBA, Miguel Díaz, la iniciativa provincial “es un fracaso, porque no aporta al conocimiento” y cargó duramente contra el ministro de educación nacional, Alberto Sileoni, al señalar que “el sistema educacional está destinado a fracasar”.
En la misma línea, el diputado nacional por el GEN, Omar Duclós, observó “un marcado deterioro de la calidad educativa” y sostuvo que “no se han desarrollado estrategias para solucionar estos problemas”. Para quien pretende convertirse en el candidato de Stolbizer en la Provincia, “falta voluntad política por ponderar la mejora educativa como una prioridad, porque no deja un rédito político inmediato”.
En contraposición, el ministro Sileoni aseveró que “necesitamos una evaluación más integral, con más chances; algunos dirán que esto es populismo y facilismo, yo digo que son más oportunidades”. “Si aprenden en abril o aprenden en septiembre, es un detalle”, evaluó. Y reforzó: “Esta no es la escuela del viva la pepa, es la escuela del 2014”.
Asimismo, Sileoni invitó a reflexionar sobre la utilidad de la repitencia en el sistema educativo al aducir que “la repitencia en los sectores más carecientes es una confusión generacional, de que no le da a los pibes. Entonces el papá llega a a la casa y dice repitió: tiene el mismo destino que yo porque no le da”.
Sin embargo, para el líder del Frente Renovador, Sergio Massa, “igualar hacia abajo no es incluir. Incluir es darle a todos las mejores posibilidades. Y al chico que tiene más dificultades, los mejores docentes y no decirles que lo mejor es zafar. La escuela cumple dos roles: inclusión y preparación para la vida del futuro”.
