Desde el 10 de diciembre, Eduardo Epszteyn tiene nueva función. Ese día fue el último de su mandato en la Legislatura porteña y el primero en su nuevo cargo como miembro de la Auditoría de la Ciudad de Buenos Aires. Por eso tuvo que trasladar sus pertenencias desde el edificio de Perú 160 a la oficina ubicada en el sexto piso de la avenida Corrientes al 640.
A pesar de su nuevo papel en el organismo de control, Epszteyn no abandonó al político que vive en él desde su juventud. Y una clara muestra de eso son las definiciones políticas que le expresó a NU en este reportaje. ?Yo siempre me mantuve en el mismo lugar y defendí las mismas ideas a lo largo de toda mi vida?, señaló en un tramo de la charla a manera de definición, la cual le calza a la perfección.
Fustiga con datos precisos la gestión del Jefe de Gobierno de la Ciudad, Mauricio Macri, con el mismo énfasis que declara su apoyo al proyecto nacional que lidera la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Y por último, no se olvida de criticar al progresismo porteño por ?vanidoso? y por falta de voluntad para unirse y convertirse en una verdadera alternativa electoral al macrismo.
Este hombre, que nació en la Capital Federal el 22 de septiembre de 1955 y que es máster en Economía, no titubea a la hora de lanzar sus aseveraciones.
?¿Qué opinión le merecen los múltiples vetos de Macri?
?Me parecen una falta de respeto a su propio bloque legislativo. Su proceder deja en evidencia que desprecia el trabajo en conjunto entre el Poder Legislativo y el Ejecutivo. No le da importancia a los consensos. Si yo fuera legislador Pro me daría vergüenza lo que hace. Pero también existe otra lectura sobre su proceder que demuestra torpeza e ineficiencia. En estos años demostró que desconocía por completo el trabajo legislativo. Un claro ejemplo de que poco le importa lo que hace su propio bloque y de la labor en conjunto es el veto al proyecto del fallecido legislador macrista Gerardo Ingaramo, que establecía brindar un subsidio de 50 mil pesos a la Asociación Síndrome de Down de la República Argentina. Una iniciativa que fue apoyada por todos los sectores, quienes en su mayoría le tenían un gran afecto al autor de la propuesta. En definitiva, los vetos tienen un claro sesgo ideológico, ya que vetó cuestiones que están relacionadas con la salud, la educación, lo social y los sectores más desprotegidos.
?¿Y qué le parece la gestión del Gobierno porteño?
?Es una gestión que esconde toda su ineptitud en la mentira de la victimización política. Ya que es una administración que dispone de efectivo, tiene autonomía presupuestaria y depende de su propia recaudación. Y con todos estos datos pretende hacerle creer a la gente que no tiene autonomía. Esta gestión se caracterizó por subir los impuestos, ahora la tarifa del subte, lograr un mayor endeudamiento y una fuerte caída de la inversión pública. Mientras la Nación se desendeuda, Macri plantea mayor endeudamiento y encima posee plata en el Banco Ciudad que no usa, como la que estaba asignada para ampliar la red de subterráneos. Además, es un gobierno que despilfarra la pauta oficial, sobreejecutando estos recursos y aumentando el presupuesto año tras año en esta cuestión.
?Y entonces, ¿cómo se explica su amplio triunfo electoral?
?El resultado electoral no es consecuencia de la gestión de Macri. El éxito se debió al discurso de víctima que utilizó ante la sociedad, al referirse a que el Gobierno nacional no lo dejaba trabajar. Y esto no es así. Por eso al observar el presupuesto del que dispone la Ciudad nos encontramos con que no hay un distrito tan autónomo como el porteño. Lo que demostraron los últimos comicios es que quedaron en pie solamente dos proyectos políticos y que el resto desapareció del escenario. Por un lado está el que representa Cristina y, por el otro, el que encabeza Macri. La idea de este último es mostrarse como una alternativa al kirchnerismo para 2015. Pero existe una clara diferencia entre ambos modelos, mientras por un lado la Presidenta gestiona, el Jefe de Gobierno no.
?¿Y cómo es eso en los hechos?
?El mejor ejemplo es la Policía Metropolitana (PM). Macri dijo que la creaba para lograr mayor seguridad y nada de eso pasó. Porque la salida de la Policía Federal de la Ciudad y la entrada en plena vigencia de la PM va a depender de un trabajo muy en conjunto de la Nación y la Ciudad. Y con Macri eso no se puede porque busca victimizarse y crear problemas entre ambas administraciones.
?En los últimos días se habló de que abandonaba el ibarrismo para pasarse a los K, ¿qué hay de cierto en eso?
?Primero tengo que empezar explicando que no entiendo por qué todos los opositores porteños al macrismo que pensamos parecido no podemos integrar un bloque unido en la Legislatura. Por eso, para mí lo mejor era unirnos con el kirchnerismo a nivel legislativo. Porque la derecha sí se une, de forma muy fuerte, y de esa manera nos gana. Y entonces creo que hay que tener una mirada más amplia y generosa porque de esa manera se le puede ganar a Macri. Yo le planteé esto a Aníbal Ibarra y él se opuso a la unión de los bloques. Pero no es solo una crítica contra él, no tengo ningún problema personal con Aníbal, sino que es algo que le sucede a toda la centroizquierda, también a los legisladores de Nuevo Encuentro.
?Entonces, ¿cómo se define?
?Soy un cuadro político que apoya el proyecto que encarna la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Por eso creo que hay que acompañar al Gobierno nacional. Porque la batalla que está dando es muy dura, por ejemplo, al meterse con las corporaciones, y es en beneficio del país. Creo que uno debe ser parte de eso, y no por eso se pierde la identidad política de cada persona. Pensar así es un error. No estoy yéndome de ningún lado ya que en la última elección el ibarrismo apoyó la candidatura de Daniel Filmus a jefe de Gobierno. Estoy siendo consecuente con lo que creí durante toda mi trayectoria política y personal.
