Peor es nada. Si bien el PRO aceptó el proyecto del oficialismo sobre el traspaso policial con la omisión voluntaria de la transferencia de recursos, el futuro de la gestión macrista deberá volver a trabajar en el diseño de la gestión en materia de seguridad ya que no contaba con la astucia del kirchnerismo.
"El derogamiento del artículo 7 de la Ley Cafiero le saca un cepo a la Ciudad. Dimos un paso en la autonomía; pero nos hubiera gustado definir qué policía queríamos y el financiamiento, con lo cual cerrábamos un ciclo. Podemos tener policía, pero no qué policía. Tenemos que empezar un diseño", comentó el diputado nacional de PRO, Cristian Ritondo en declaraciones en Radio América.
Pero el trabajo sobre el diseño de la fuerza de seguridad porteña tendrá que esperar "que trate el Senado" el proyecto con media sanción, y "después veremos cómo avanzamos".
Crítico de la postura de los legisladores provinciales que se manifiestan en contra de la transferencia de funciones en simultáneo con las partidas presupuestarias correspondientes, y a favor de la redistribución del dinero que la Nación ya no destinaría a la seguridad de la Capital, Ritondo resaltó: "La Ciudad aporta a la Nación el valor de pagar toda la policía de la Argentina y recibe sólo lo que cuesta la Policía Federal. La Ciudad recibe 10 veces menos que Santa Cruz y tributa 16 veces más que Formosa". Y agregó: "Somos solidarios en nuestro sistema de salud, tenemos una alta matrícula en los colegios con gente que no vive en el territorio y la Ciudad no recibe ningún beneficio".
