Daniel Presti es diputado porteño desde 2011. Llegó a ocupar esa banca luego de desempeñarse durante cuatro años como subsecretario de Justicia del Gobierno porteño. Según él mismo confiesa, no creía en la política pero lo sedujo la gestión macrista y se introdujo en ella. Es abogado y desde su lugar en la Legislatura impulsa proyectos relacionados con la Justicia de la Ciudad. También forma parte de Abogados Pro, un espacio creado recientemente que busca consolidarse con miras a la candidatura como presidente del actual Jefe de Gobierno, Mauricio Macri.
“Estoy convencido de que el kirchnerismo lo que quiere hacer es manejar a los jueces, no quiere la independencia del Poder Judicial, no quiere que las instituciones tengan su propio peso, y eso se ve en lo cotidiano”, dispara Presti, cuando se le pregunta por la reforma judicial impulsada por el Gobierno nacional.
–¿Usted es de los que afirman que los cambios impulsados para el Consejo de la Magistratura nacional son inconstitucionales?
–El artículo 114 habla específicamente de esto. Los abogados tienen que elegir a sus representados en el Consejo. No se puede elegir por el voto popular, se supone que es una modificación en contra de la Constitución. Pero más allá de eso, lo que se pretende es manejar al Poder Judicial de la Nación, manejar sus propios jueces según sus propios intereses. Por supuesto estoy en contra. Por otra parte, aumentar de 13 a 19 el número de integrantes del Consejo de la Magistratura es un despropósito que busca licuar el peso de las minorías. Toda esta reforma conspira contra nuestro sistema republicano y la división de poderes.
–¿Cuál será el papel de Abogados Pro?
–La idea es construir una alternativa de poder dentro de los abogados donde nosotros podamos organizarnos. Ya ha ocurrido en anteriores elecciones que varios consejeros llegaron a estar sentados donde están porque nosotros hemos ayudado para que estén ejerciendo sus cargos tanto en el Consejo de la Nación o en el Consejo de Ciudad. Entonces, lo que tenemos que hacer es, siempre apuntado a Macri presidente, crear una alternativa dentro de los propios abogados y discutir de otra manera. No que me vengan a buscar en la recta final diciendo “a ver cómo me podés ayudar” o “cómo podemos coordinar”, sino tomar la iniciativa de construir una alternativa para después, en caso de hacer un frente, ir organizados en una elección del Colegio Público de Abogados, en una elección de graduados, etcétera. Nosotros tenemos que construir alternativas en la Ciudad y en todos lados para ejercer lugares de poder.
–¿Era algo que le faltaba al Pro?
–Al Pro le faltaba una organización mayor en este sentido. Siempre se trabajó pensando en esto. Ahora va a ser con un liderazgo que lo va a tener Pablo Clusellas, nosotros ayudando y secundando, obviamente, siempre con las características nuestras: transparencia, alegría, pasión. Se trata de hacer una alternativa seria para los matriculados.
–En cuanto a la Justicia en la Ciudad, ¿qué proyectos considera que son necesarios actualmente para aportar cambios positivos?
–Hay un trabajo que estamos analizando dentro de mi equipo y que puede ser muy bueno. Está vinculado con la incorporación de la tecnología en el Poder Judicial de la Ciudad. Apunta a incluir el expediente electrónico, la firma digital, las notificaciones electrónicas y demás. Servirá para que el Poder Judicial, ahora que ha crecido en su número y magistrados nuevos, tenga mejores herramientas, a la altura de los tiempos en que vivimos. No se puede a esta altura andar con papeles. Estamos coordinando este proyecto con los diferentes actores de la política judicial.
–¿Qué otros proyectos ya se han presentado y han sido de ayuda en ese ámbito?
–Hay uno de mi autoría, que es una modificación de algunos requisitos previos a la elección de consejero. Ahora, para ser consejero se necesita pasar una audiencia pública y que los antecedentes estén online. Eso se aprobó con un consenso amplio.
–¿Qué análisis hace del accionar de la Justicia en el ámbito porteño?
–En cuanto a los nuevos jueces, espero que fallen de acuerdo a derecho y no utilicen sus fallos de manera política. Porque a veces lo que no se consigue por la política, se trata de canalizarlo a través de la Justicia para entorpecer una gestión. Eso está mal. Por ejemplo, lo que ha pasado con el freno a la suba de la tarifa del subte: el juez tendría que tener todos los elementos antes de frenarla. Si un juez quiere hacer política, que renuncie al cargo y que se dedique a ser político. Que un juez frene una gestión me parece una aberración.
–¿En qué temas debería avanzar la Legislatura para mejorar la Ciudad?
–Nosotros tenemos un denominador común, que es mejorar la calidad de vida de la gente. Todos los proyectos tienen que estar encauzados en ese sentido. Las comisiones que integro y mi trabajo particular apuntan a eso. El objetivo político es que Macri sea presidente de la Nación. Yo hace siete años era uno de esos que decía “la política no sirve”, “¿qué hacen los políticos?”. Después cambié mi forma de pensar, renuncié a mi cargo en el Poder Judicial y me dediqué a la política. El liderazgo de Mauricio Macri fue lo que me hizo dar ese salto y preguntarme cómo podía ayudar. Desde mi gestión anterior durante cuatro años en el Poder Ejecutivo y desde que estoy en la Legislatura, creo que estoy colaborando con ese objetivo de que la gente viva mejor.
–¿Cómo ve a la oposición a la hora de tratar proyectos?
–En muchos aspectos se puede hablar bien y en otros no. Si nosotros tenemos ese denominador común de que las leyes sirvan para hacerle la vida más fácil a la gente, no tendríamos que tener ni siquiera colores. Tendríamos que estar los 60 juntos para laburar y sacar leyes. Creo que la oposición debería ser más constructiva y no tan destructiva.
