En un plenario que contó con la participación de más de quinientos militantes de la Ciudad de Buenos Aires y representantes de la organización en el resto del país, Seamos Libres discutió sobre la situación nacional, la necesidad de consolidar un espacio nacional de la izquierda popular y expresó su apoyo a la candidatura de Mariano Recalde para la Jefatura de Gobierno en las elecciones porteñas del próximo 5 de julio.
En ese sentido, Jonathan Thea, secretario general del partido, indicó: “Las candidaturas de Horacio Rodríguez Larreta y de Martín Lousteau son opciones electorales que no sólo no representan los intereses de la mayoría de los porteños, sino que además son dos caras de una misma moneda. Sus diferencias cosméticas no deben tapar el hecho de que comparten un mismo proyecto político para la Ciudad. Por lo que sostuvo que “Desde una perspectiva de izquierda y popular es que Seamos Libres tomó la decisión de apoyar a Mariano Recalde, ya que es muy importante lograr que en el ballotage se encuentre expresado un programa que contemple las necesidades y los intereses de los sectores populares por los que nuestra organización milita todos los días”.
Por su parte, el legislador porteño Pablo Ferreyra destacó “la necesidad de terminar con ocho años de gobierno del PRO, que empeoró notablemente el acceso a derechos fundamentales para el desarrollo de una vida digna para los porteños, como educación, salud, trasporte y seguridad”, y agregó: “Apoyamos la propuesta del Frente para la Victoria para la Jefatura de Gobierno, porque estamos convencidos de que es la opción que mejor expresa los intereses de los sectores populares y los avances de los últimos doce años en la Argentina”.
En tanto, Mariano Recalde se dirigió a los militantes de Seamos Libres y manifestó:”No lo siento un apoyo sino un acompañamiento, entre compañeros que venimos de una misma historia, la militante. Nuestro desafío es seguir profundizando este proyecto político que viene transformando la Argentina desde 2003″.
Por otra parte, Recalde se refirió a la política cultural: “Nosotros queremos una Ciudad con más centros culturales. Mientras Cristina inaugura el centro cultural más grande de Latinoamérica y lo abre gratuitamente al público, Macri cierra los centros culturales de barrio”.