María Rosa Muiños: “Scioli nos va a dar mucha libertad”

María Rosa Muiños: “Scioli nos va a dar mucha libertad”

Por Antonio Lizzano

La diputada porteña es peronista de toda la vida. Y eso queda claro en la nota con Noticias Urbanas, en la que predice que el gobernador bonaerense será el futuro presidente.


María Rosa Muiños es peronista, y esa definición la pinta de cuerpo entero. Milita en el PJ desde 1987 e integra la agrupación Peronismo por la Ciudad, que lidera el actual titular del PJ local, Víctor Santa María. En 2008 fue directora general del Centro de Estudios de Fortalecimiento Institucional (CEFI) de la Defensoría del Pueblo de la Ciudad. Y desde 2013 es legisladora porteña. En la contra de Noticias Urbanas opina sobre el futuro del Frente para la Victoria porteño con Scioli como presidente, del peronismo de la Capital y del fenómeno Lousteau, entre otros temas.

–¿Cómo ve el futuro del peronismo de la Ciudad en caso de que Scioli sea presidente?

–Creo que vamos a ganar en primera vuelta, de eso no tengo duda. Entonces vamos a tener la oportunidad de articular políticas con la provincia de Buenos Aires y con la Nación. Y todo esto es parte de un proceso madurativo al que nosotros debemos acoplarnos. Al ser durante tantos años la fuerza del Gobierno nacional, somos los más demorados en tomar como propio el tema de la autonomía, por eso hago hincapié en el proyecto de Scioli. La autonomía es una de las banderas de Scioli. Él ha descentralizado el Gobierno bonaerense, dándoles mucho poder a los municipios, y nosotros entendemos que las comunas son similares a los municipios, porque tienen una cantidad similar de habitantes y por eso la administración debería ser similar. Con una diferencia importante, que el presupuesto de la Ciudad es mucho mayor que el de la Provincia, si lo medimos por cantidad de territorio. Por eso me parece que vamos a estar en mucha sintonía con Scioli y nos va a dar mucha libertad para construir un partido propio del distrito y no con tanta dependencia del Gobierno nacional.

–En el peronismo porteño hay dos grupos: uno más camporista o K, y otro más peronista puro, que parece ser el que impulsa Scioli. ¿Cómo conviven estos dos grupos?

–Con dificultad. Me parece que todo es parte del mismo proceso. A nosotros nos costó mucho confluir y llegar a acuerdos con sectores que no provenían del peronismo y el kirchnerismo a través del armado de Unidos y Organizados, que nos llevó a tener que sentarnos, escuchar y discutir con otros sectores. Eso es parte del proceso de crecimiento. Ahora, estamos sumando otros actores y otros sectores. Todo es parte de lo mismo. Creo que eso puede producir una crisis, pero tiendo a pensar que las crisis son oportunidades.

–Siguiendo esa línea, ¿el PJ debe abrirse o afianzarse hacia adentro?

–Estamos en una coyuntura electoral que nos obliga a hacer todo al mismo tiempo.

–¿Cómo ve el futuro del bloque legislativo porteño del Frente para la Victoria a partir del 10 de diciembre?

–Tengo muchas expectativas puestas en el funcionamiento del bloque. Creo que va a ser bastante homogéneo, que va a confluir en una sola voz.

–¿Cuáles serían las diferencias entre el bloque que viene y el actual?

–Ahora tenemos un interbloque de 17 legisladores, que está integrado por el Frente para la Victoria, Nuevo Encuentro, el bloque Sindical Peronista, el Partido Solidario, Liberación, Seamos Libres y el Frente Progresista Popular. Esa composición muestra la realidad actual. Por eso, tengo la expectativa y trabajo para que en la próxima Legislatura sea solamente un bloque.

–¿Quién podría ser el jefe del nuevo bloque?

–Hay figuras que se destacan dentro de los legisladores que nos quedamos y dentro de los que vendrán. La cuestión se debate pero todavía no hay nada firme.

–¿Cómo analiza el fenómeno Lousteau?

–Me parece que está bueno que emerja otra fuerza que haga que nosotros también empecemos a ponernos más serios en la discusión y en las intervenciones políticas. Creo que eso fue lo que produjo Lousteau. Yo lo noté el día del debate entre los tres candidatos porteños. Me parece que lo que hace la irrupción de una fuerza nueva es levantar el compromiso y la responsabilidad de los que venían trabajando los temas con anterioridad. Porque te levanta el piso. Encima Lousteau es un candidato muy sólido profesionalmente. Primero, porque tuvo cargos importantes, en la provincia de Buenos Aires y en la Nación. Y tiene un perfil muy agradable para el porteño: es joven, es cool, es profesional, es el esposo de Carla Peterson y es un señor ordenado a pesar de su juventud y de su arrastre con las mujeres, porque todos sabemos que tuvo sus historias públicas. Me parece que es un combo que vende bien y eso hace que los candidatos que ya estaban más o menos posicionados tengan que salir a redoblar esfuerzos. No solamente en la venta de imagen, sino en la información y en la elaboración del discurso. Eso te pone en la obligación de debatir, leer y aprender más. A mí me parece que Lousteau tiene un perfil muy parecido al de Aníbal Ibarra en sus inicios. Una cosa que al porteño le gusta mucho es no encorsetarse en una ideología determinada y optar por un candidato de esas características, apartidarias, se podría decir. No hay que olvidar que Lousteau fue funcionario de Felipe Solá, ministro de Economía del Frente para la Victoria y ahora aparece liderando una alianza muy grande.

–¿Qué debería hacer el PJ de la Ciudad para ser una opción de gobierno teniendo en cuenta los gustos del porteño que usted mencionó?

–Tenemos que hacer un proceso de reconversión importante. Tenemos un problema con el electorado porteño, pero el problema es nuestro, no del electorado. Me parece que nosotros somos muy prejuiciosos. Es cierto que hay una cantidad de gente que es antiperonista por definición, y me parece que nosotros a la hora de salir a construir nuestro discurso, esa cuestión nos retrae y preferimos no hablarle a esa gente, total, como es antiperonista se la da por perdida. Entonces lo que se hace es seguir trabajando sobre lo propio, hablándole al propio, que es el piso y el techo de los que no terminamos de salir. No nos dirigimos claramente hacia los vecinos que no nos visualizan como opción electoral. Es muy llamativo que Lousteau empezara su campaña con el eslogan “Evolución”, diciendo: “Somos como el Pro pero mejores”, y terminara su campaña, que lo llevó al punto casi de empatar con Rodríguez Larreta, con el mismo discurso que nosotros tenemos desde hace años en la Ciudad.

Te puede interesar

Qué se dice del tema...