La política tiene reglas no escritas que se cumplen a rajatabla. La estrategia política tiene mucho que ver con la táctica utilizada en la guerra de guerrillas: si el enemigo avanza, uno retrocede; en cambio si el enemigo retrocede, uno avanza.
La tragedia de Time Warp sacudió la calma legislativa. El lunes por la tarde, el director ejecutivo de la Agencia Gubernamental de Control (AGC), Matías Álvarez Dorrego, concurrió a la Legislatura para dar explicaciones.
Al final de dicha exposición, los legisladores Gabriel Fuks (Frente para la Victoria) y Hernán Rossi (SUMA+), se comprometieron a elaborar un pedido de informes que sería presentado en la sesión del jueves. El jefe del bloque del Pro, Francisco Quintana, agregó que se trabajaría en un proyecto consensuado. Sin ambargo, menos de 24 horas después el consenso estalló en mil pedazos.
En la reunión de asesores parlamentarios, que se realizó el martes al mediodía no hubo posibilidad de ningún acuerdo entre los bloques. Especialmente entre el Pro y el FpV. Lo mismo ocurrió en la reunión de Prelabor Parlamentaria que se realizó a la tarde.
“La cuestión tenía dos aristas bien distintas: o se presentaba un pedido de informes consensuado, o cada bloque se cortaba solo y presentaba el suyo. Como no hubo acuerdo cada uno hizo la suya”, le dijo a Noticias Urbanas un asesor parlamentario de un diputado porteño.
Sin embargo, para el FpV la situación era bien distinta. “No había posibilidad de consenso porque nosotros ya estábamos elaborando un pedido de interpelación a los funcionarios de la AGC, y al mismo tiempo un pedido de informe”, le dijo a NU un colaborador de un legislador del Frente para la Victoria.
Este miércoles se terminaron definir las posturas, y se agudizaron las posiciones. El FpV va por todo. El pedido de informes que presentará mañana es el 942/16, pero además se está estudiando la posibilidad de pedir la interpelación del ministro de Justicia y Seguridad del Gobierno de la Ciudad, Martín Ocampo. “Es el jefe de la Agencia Gubernamental, así que tiene que dar respuestas”, le dijo un diputado a este medio.
Pero lo que más inquieta al Pro, es que el FpV pretende pedir la interpelación de “otros funcionarios”.
Para lograr una sesión especial para interpelar a los funcionarios porteños, se necesitan 20 votos. El bloque del Fpv tiene 13 legisladores, pero confían en que se sumaran los diputados del socialismo, Roy Cortina y Hernán Arce; los tres de la izquierda, Marcelo Ramal y Patricio del Corro del FIT, y Fernando Vilardo de Autodeterminación y Libertad (AyL). También pretenden convencer a Gustavo Vera de Bien Común y hasta creen que pueden contar con el apoyo de los cinco legisladores de SUMA+.
Roy Cortina ya había anunciado el lunes, durante la exposición de Álavrez Dorrego, que su intención era pedir la interpelación de Ocampo.
“No van a llegar, SUMA+ no los va a acompañar. Y en su propio bloque también hay disidencias, Claudio Palmeyro, del sindicato de taxis, no se sumará al pedido de interpelación por la sencilla razón de que el Pro está apoyando la lucha de los taxistas contra Uber”, le aseguró un diputado macrista a NU.
El FpV está confiado y cree alcanzar los 20 votos. “Aunque SUMA+ no nos apoye, llegamos igual con los dos socialistas, los tres de la izquierda y los monobloques, esa suma nos da 20”, redobló la apuesta la fuente del FpV consultada por este medio.
Noticias Urbanas adelantó el lunes que el bloque de SUMA+ estaba elaborando un pedido de informes. Pero es difícil arriesgar que posición tomarán con respecto al pedido de interpelación.
“Si tu enemigo retrocede, tú avanza”, el FpV está siguiendo esa máxima al pie de la letra.
