El debate del teletrabajo llega a la Legislatura porteña. El objetivo es incorporarlo en el empleo público de la Ciudad. Se establece el derecho del teletrabajador a la intimidad de la vida personal y la privacidad de su domicilio.
La legisladora de Vamos Juntos, Victoria Roldán Mendez, presentó un proyecto de ley que modifica la Ley de Relaciones Laborales en la Administración Pública de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires N° 471 e incluye la opción del teletrabajo bajo los principios de voluntariedad, igualdad de trato, reversibilidad y privacidad.
A raíz de la pandemia y el consecuente aislamiento obligatorio en el mundo, esta modalidad laboral se impuso en todos los ámbitos acelerando un proceso que parecía lejano. Las reuniones virtuales y los documentos colaborativos se han convertido en la nueva cotidianeidad de muchos trabajadores/as, obligando a modificar las prácticas de trabajo tradicionales a las que la sociedad estaba acostumbrada.
“El trabajo a distancia llegó para quedarse. La legislación debe acompañar este proceso de cambio para garantizar a los trabajadores y trabajadoras que opten por esta modalidad en acuerdo con su empleador, de gozar de todos los derechos laborales sin discriminación ni diferencia y poder desempeñarlo teniendo en claro cuáles son los derechos y obligaciones de cada una de las partes”, enfatizó la Roldán Méndez.
Regular el teletrabajo es una deuda pendiente que tiene la legislación de la Ciudad. En el Congreso nacional se están debatiendo distintos proyectos con el mismo objetivo: otorgar un marco legal a una práctica laboral que ya es una realidad en toda la Argentina. Por eso, es importante trabajar en la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires las distintas alternativas que plantea esta modalidad en el ámbito público local.
Una de las propuestas más novedosas de este proyecto es que incorpora un inciso que permite a trabajadoras/es a optar por el teletrabajo cuando finalice la licencia por maternidad, nacimiento o adopción hasta el año de del niño/a. “Considero que es fundamental incorporar la perspectiva de género en las normas que sancionamos. Este proyecto ofrece la misma posibilidad del teletrabajo a las madres y personas no gestantes con la idea de fomentar el reparto de las tareas en el hogar y de cuidado que siempre recaen sobre las mujeres”, destacó Roldán Mendez.
Según los fundamentos del proyecto, el teletrabajo mejora la calidad de vida de los trabajadores, reduce los gastos de traslado, tiempo y estrés emocional. Asimismo, el teletrabajo beneficia al medio ambiente porque se reducen las emisiones de carbono y el calor que irradian los vehículos, se evita el congestionamiento vehicular y se disminuye el consumo de papel, cartuchos, y materiales plásticos.