Tras la denuncia por abuso sexual realizada por su sobrina, el senador nacional José Alperovich pidió una licencia en su banca.
En el escrito, Alperovich detalló: “En estos días, como es de público conocimiento, he sido víctima de denuncias promovidas en mi contra”. La carta está dirigida a la presidenta del senado y vicepresidenta de la Nación, Gabriela Michetti.
“La imputación es absolutamente falsa, lo cual demostraré, a la corta o a la larga, ante la Justicia”, agregó el senador nacional denunciado por el delito de violación por una excolaboradora y familiar suya.
“A fin de dedicar mi esfuerzo y mi tiempo a desbaratar la infamia, aclarar la verdad, y reparar mi honor, le pido expresamente que me confiera licencia en mi honorable cargo”, cierra el senador tucumano su misiva.
La decisión del Senador servirá también para disolver un frente de tormentas que se avecinaba sobre la jura de los senadores electos y la propia ceremonia de asunción del nuevo Presidente. La atención periodística concentrada en si Alperovich asistiría o no a esos eventos amenazaba con empañarlos, aunque sea parcialmente.
El lunes por la mañana y durante una audiencia de casi tres horas y media en dependencias judiciales de Tucumán, la sobrina del senador había ampliado la denuncia por abuso sexual contra el exgobernador de esa provincia y expresó su disposición de declarar por los mismos hechos en los tribunales de Buenos Aires.