Rodríguez y Doy no lograron ampliar su base

Rodríguez y Doy no lograron ampliar su base

La diputada Silvia Gottero no se unirá a ellos. La diputada Juliana Marino parece que tampoco. Rodríguez y Doy - por lo tanto - seguirán como empezaron: dos hombres en la ciudad


La diputada de Encuentro por la Ciudad, Silvia María Eva Gottero, se comunicó con la redacción de NOTICIAS URBANAS para desmentir que esté a punto de abandonar el bloque al que pertenece para acompañar a los diputados Enrique Rodríguez y Miguel Doy en la conformación de una nueva bancada.

"Me defino como peronista y soy opositora, para lo cual fui votada – aclaró -, lo que hace que la actitud de los diputados que cambiaron de bloque me resulte totalmente ajena. Ese es el origen de mi diputación y todavía hoy me mantengo fiel a la ideología política que me impulsó. Me considero
opositora al Gobierno de la Ciudad, no sólo por el mandato para el que se me eligió, sino porque creo que se puede gobernar mejor la Ciudad de Buenos Aires".

La diputada Gottero, esposa del dirigente del gremio del Tabaco y directivo del club Boca Juniors, Roberto Digón, finalizó manifestando que "Soy de las que creen que el cumplimiento de los mandatos implica también el mantenimiento de los programas y definiciones por los que se
pidió el voto a la ciudadanía en el momento de la campaña electoral".

Gottero fue mencionada ayer en una crónica sobre la deserción de dos miembros de su bloque, Encuentro por la Ciudad, que agrupa a los seguidores de Gustavo Béliz y del duhaldimo porteño en la Legislatura porteña. Declaraciones de colegas suyos la suponían en solidaridad con los integrantes de la bancada en formación, que agruparía, además a la diputada Juliana Marino, que forma parte de la Corriente que orienta el gobernador de Santa Cruz, Néstor Kirchner, junto a Rodríguez.

Juliana Marino, de todos modos, declaró esta tarde a NOTICIAS URBANAS que "cualquier movimiento que ocurra será después del 14 de octubre. El 2003 está ya muy cerca y es necesario luchar por ideas". Esto significa que la nueva bancada se quedó sin mujeres antes de empezar, con la desmentida de Gottero y la decisión de Marino de atrincherarse en su bloque unipersonal, a salvo de tanto fuego cruzado.

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