El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, de 66 años, fue hospitalizado de urgencia en la madrugada de este lune para tratar una posible obstrucción intestinal. El mandatario, que recibió una puñalada en el abdomen durante la campaña presidencial de 2018, fue trasladado al hospital Vila Nova Star, en Sao Paulo, tras sus vacaciones de fin de año en Santa Catarina, según informó TV Globo y varios otros medios.
En declaraciones recientes por medio de su cuenta oficial de Twitter, Jair Bolsonaro detalló lo que sucedió en las últimas horas: “Empecé a sentirme mal después del almuerzo del domingo. Llegué al hospital hoy a las 3:00 am. Me pusieron una sonda nasogástrica. Se realizarán más pruebas para una posible cirugía por obstrucción interna en la región abdominal”. En su posteo también compartió una foto suya desde el hospital en el que se encuentra.
Según publicó el portal de noticias UOL, la confirmación de la hospitalización para la realización de exámenes ante sospechas de obstrucción intestinal la hizo el médico Antonio Luiz Macedo, quien también en 2018 asistió al mandatario luego de la puñalada recibida en el abdomen en plena disputa electoral.
Macedo, que se encontraba en las Bahamas, aseguró a UOL que está volando a Sao Paulo para llegar por la tarde y atender al presidente de Brasil, quien ahora está bajo tutela de su equipo, que todavía esperan saber si va a ser necesaria la intervención quirúrgica después de los exámenes de chequeo.
Por ahora, solo se sospecha de esa posible obstrucción intestinal, conocida en términos médicos como “suboclusión intestinal”, y Macedo aseguró: “Se harán tomografías y más pruebas para saber qué hay en el abdomen. Aún no sabemos, pero podría ser causado, por ejemplo, por una comida mal masticada, entre otros factores”.
Contactados por la AFP, ni el servicio de prensa de la presidencia ni el hospital respondieron hasta el momento.
El mandatario recibió fuertes críticas por trasladarse fuera de servicio a Santa Catarina mientras en Bahía la gente se enfrenta a las inundaciones que castigaron sus vidas y que ya dejaron un saldo de 25 muertos.
Bolsonaro ya fue ingresado a mediados de julio de 2021 para ser tratado por una obstrucción intestinal. En esa ocasión, permaneció cuatro días en el mismo hospital, Vila Nova Star. En ese entonces, sí se había considerado la posibilidad de someterlo a una cirugía pero la idea quedó descartada luego de que los intestinos del presidente volvieran a funcionar de forma correcta.
En ese momento, Macedo había afirmado en entrevista con el diario O Globo: “El accidente de la puñalada no fue broma. Y las cirugías fueron absolutamente necesarias, pero agreden el órgano, claro. Por eso el intestino del presidente se volvió más sensible a las adherencias”, causadas, por ejemplo, por “un alimento más espeso y mal masticado”.
Debido a la puñalada que recibió en 2018, el dirigente ultraderechista pasó por al menos cuatro cirugías que le volvieron más proclive a sufrir trastornos intestinales. Desde ese año se contabilizan dos estadías clínicas en 2018, una en 2019, una en 2020, una en 2021 y la actual en 2022.