Los taxis porteños volverán a aumentar antes de fin de año. La suba será del 18% y la bajada de bandera diurna costará $ 38,50. El incremento debe ser discutido en audiencia pública, una paso formal previo a la aplicación. En marzo, la tarifa había subido un 17,7%.
De esta manera, la ficha diurna pasará de $3,26 a $3,85, mientras que la nocturna se irá a $ 4,62 (ahora cuesta $ 3,91) y la bajada de bandera después de las 22 costará $46,20. En 2010, la Legislatura porteña determinó que la tarifa nocturna (de 22 a 6) sea un 20% mayor que la diurna.
De acuerdo con el decreto 351/18, publicado este viernes en el Boletín Oficial de la Ciudad, la audiencia pública se realizará el viernes 7 de diciembre de 2018 a las 12 en el Centro Cultural Adán Buenos Ayres, en el Parque Chacabuco.
La revisión tarifaria fue solicatada por la Asociación Taxistas de Capital (ATC.), la Unión de Propietarios y Mandatarios de Taxis de la República Argentina (UPYMRA), la Unión de Propietarios de Autos de Taxis (UPAT), y la Sociedad Propietarios de Automóviles con Taxímetro (SPAT).
El argumento que justifica la suba tiene que ver con la adecuación de la actividad a la suba de costos, tanto de combustibles, como de mantenimiento, que afrontan tanto propietarios como conductores de taxis, producto de la inflación acumulada en lo que va del año.
El aumento podría empezar a aplicarse a mediados de diciembre, una vez que se concrete la audiencia pública y se realice la implementación técnica.
Una vez que se concrete el incremento, un viaje del Obelisco a Retiro, que ahora sale $ 88,02, costará $ 103,95. Desde el mismo punto de partida hasta Acoyte y Rivadavia saldrá 192,50, y hasta Constitución se va a $ 88,55.