El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires donó un edificio y un vehículo para que, mediante un convenio firmado con el Ministerio Público de la Nación, los vecinos de Pompeya tengan a partir de este lunes una fiscalía en la zona. Ésta recibirá denuncias sobre hechos producidos en los limites de las comisarías 32 y 34. Justamente a esta última seccional pertenecían los policías que obligaron a arrojarse al Riachuelo a Ezequiel Demonty, quien luego de una incesante búsqueda fue hallado ahogado.
Por este motivo, los padres de Demonty participaron del acto de inauguración de la fiscalía, invitados por el jefe de Gobierno de la Ciudad, Aníbal Ibarra, quien afirmó: "Ese lamentable suceso fue el que generó, no sólo la indignación, sino un reclamo por la presencia de una fiscalía aquí en el barrio de Pompeya, que abarcara más allá de los límites del propio barrio. En ese momento nos pusimos a trabajar para que esto fuera realizado, ya que no queríamos que el hecho, una vez que desapareciera de los medios, quedara en el olvido. Nos pusimos a trabajar en la búsqueda de un lugar y hoy estamos aquí, haciendo realidad lo que nos propusimos".
También concurrieron a la apertura el ministro de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos de la Nación, Gustavo Beliz, el secretario de Seguridad, Norberto Quantín, y el procurador General de la Nación, Nicolás Becerra.
La nueva fiscalía, que está ubicada en la Avenida Almafuerte 33, es un organismo del Estado inserto en la administración de justicia, pero independiente de los jueces. La Fiscalía de Distrito de Nueva Pompeya tomará intervención directa y exclusiva en todos los casos de hechos presuntamente ilícitos de competencia de la justicia de instrucción, correccional y de menores denunciados por los vecinos y cometidos en la jurisdicción de las comisarías de la zona.
Cualquier persona que se considere lesionada por un delito o que haya tomado conocimiento de la comisión de un delito puede denunciarlo por escrito o verbalmente; personalmente o a través de un representante.
"Se trata -dijo el jefe de Gobierno- de una fiscalía del ámbito nacional que va a trabajar en este barrio. Esto significa un mayor contacto de quienes tienen a su cargo una parte importante de la investigación judicial con los vecinos, con las cosas que ocurren en el barrio. Además es un ida y vuelta. Porque no sólo el fiscal va a conocer más el ámbito social vecinal, qué lugares o sectores son los más vulnerables o quiénes pueden estar involucrados en la comisión de delitos, sino que los vecinos, cuando detecten irregularidades, cuando vean problemas o funcionarios que, en lugar de cuidarnos, se dedican a incumplir la ley tienen al fiscal cerca. Así se logra una mayor eficacia en la investigación de los delitos".
Además, Ibarra manifestó que es importante descentralizar las tareas judiciales, tal como se viene haciendo desde hace algunos años en Saavedra con importantes resultados, que, según espera el jefe de Gobierno, se trasladarán a La Boca con la apertura de una fiscalía, "en poco tiempo". Actualmente ya hay una fiscalía en ese barrio, pero aún no fueron nombrados los fiscales.
