Parece una noticia de otros tiempos o de otra parte del mundo, sin embargo sucedió hace poco y en la Argentina. El auto de Facundo Aveiro fue baleado en Pizarro al 1500, en Ramos Mejía. Dos hombres que circulaban en moto dispararon en cinco oportunidades. Testigos circunstanciales sostienen que al escuchar las detonaciones vieron cómo corría un joven (con casco) hacia una motocicleta que lo aguardaba. El hecho ocurrió cerca de las 22.
El auto pertenecía al secretario general de Químicos.
Todo parece indicar que es un acto intimidatorio que se produce en pleno proceso preelectoral de la organización que encabeza Aveiro. El joven gremialista declaró que este acto violento se suma a las amenazas telefónicas que fueron recibiendo en los últimos días tanto el titular de SPIQyP como otros miembros de la Comisión Directiva. Con tono amenazante, los mensajes se repitieron en los celulares, así como también en el conmutador de la sede de Avellaneda.
“Lo tengo que vincular con las próximas elecciones porque los mensajes que fueron dejando en los teléfonos hablaban de que me borre, que algo me iba a pasar y cosas por el estilo”, declaraba en la puerta de la Comisaría 1ª de San Justo, La Matanza, mientras esperaba a los peritos tras formalizar la denuncia en el lugar.
“Las elecciones son en noviembre, y convoco a la lista de unidad. Entiendo que esto tiene que ver con una forma de hacer gremialismo que ya es arcaica. Este no es el camino que con tanta dignidad forjó Pedro Salas”, dijo en referencia a quien tomó el timón de la organización gremial en las épocas más difíciles del país, además de enumerar las acciones que llevan adelante para con los afiliados.
Inmediatamente después de ocurrida la balacera, el 911 recibió varios llamados de vecinos y comensales del restaurante donde se encontraba cenando Aveiro. En pocos minutos llegaron al lugar los efectivos policiales, quienes tomaron nota de lo sucedido y, tras dialogar con los testigos y constatar que no había lesionados, convocaron a Aveiro a formalizar la denuncia en la sede policial.
SPIQyP es el gremio que nuclea a los trabajadores químicos y petroquímicos de la Ciudad de Buenos Aires y zonas adyacentes.