La Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires presentará en los próximos días un proyecto legislativo para obligar al Gobierno porteño a dar marcha atrás con el incremento en el impuesto a las patentes que afecta a unos 200.000 vehículos porteños.
El año pasado, la defensora Alicia Oliveira envió a la Legislatura porteña un proyecto de resolución en el que planteaba dejar de lado el aumento programado por el Gobierno porteño para las patentes de los vehículos. Finalmente, los diputados excluyeron del incremento al 80% del parque automotor, por lo que quedaron afectados sólo los vehículos valuados en más de 14.250 pesos y aquellos que mantienen cuotas impagas.
Por esa razón, la Defensoría del Pueblo trabaja en una nueva presentación en la que se plantea que se dejen sin efecto los incrementos, que en muchos casos superan el ciento por ciento. "Se aprecia un desproporcionado aumento en los importes de la contribución, que sumado al proceso inflacionario, produce una grave disparidad entre el valor de los bienes y la capacidad contributiva de sus propietarios", señaló Oliveira.
"Además -finalizó la defensora de los porteños- el incremento del valor de los combustibles, de las autopartes nacionales e importadas, de los costos de reparación, de los seguros de responsabilidad y daños, que han sufrido aumentos que rondan el 70%, tornan casi imposible el mantenimiento de los rodados".