Las problemáticas urbanas y sociales no distinguen el límite del Riachuelo y la avenida General Paz. Por esta razón, a partir del 10 de diciembre, el electo jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri y el futuro gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, deberán trabajar en la solución de problemas comunes.
Representando a fuerzas opositoras, el futuro jefe de Gabinete de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta, y su par bonaerense Alberto Pérez, adelantaron algunos de los principales puntos a los que abocarán su labor.
Educación, salud, inversión en infraestructura, transportes, seguridad y basura serán ejes de trabajo para porteños y bonaerenses.
"Apostamos a mejorar la inversión y a manejar una policía propia", aseguró Rodríguez Larreta. "Por la urgencia del problema, creemos que hay que traspasar la Policía Federal. Nosotros confiamos en el mensaje de diálogo que dio la Presidenta electa, aunque es cierto que la actitud de Aníbal Fernández no ayuda para nada", agregó por el Canal TN.
Sobre el conflicto con el depósito de los residuos generados por los porteños, el vicepresidente de PRO manifestó que "no hay soluciones mágicas" pero que impulsarán la "Ley de Basura 0" para reducir un 30 por ciento del caudal.
"No existe la posibilidad de poner incineradores. Se discutirá todo seriamente con una base técnica y una mesa de diálogo. Para el Riachuelo se necesita una acción conjunta", comentó.
Por su parte, el futuro jefe de Gabinete bonaerense, Alberto Pérez, resaltó que recibirán una provincia "con un déficit fiscal que para el 2008 será de 3.500 millones aproximadamente" y que "muchos de los problemas que tiene la provincia "son de índole nacional".
"Nuestros enemigos no son ni Macri ni los vecinos de la Ciudad", subrayó. Y agregó: "Trabajaremos en forma coordinada con una discusión conjunta".
La inseguridad también intentarán resolverla pero con mayor presencia policial y prevención. Y con la recepción de la basura capitalina se mantendrán firmes en la postura de establecer un canon.
Hasta el momento el encuentro oficial entre Mauricio Macri y Daniel Scioli para acordar políticas no se ha podido concretar. Sin embargo el actual Vicepresidente habría dado su aprobación para que sus equipos técnicos se reunieran con los del ingeniero.
Si bien tanto Scioli como Macri reconocen tener una buena relación personal, el objetivo común de llegar a la presidencia en el 2011 podría dificultar el trabajo conjunto. Y en este punto el que lleva las de ganar es Scioli, quien no sólo representa a la fuerza que gobernará la Nación por los próximos cuatro años y administrará la provincia con mayor número de electores del país, sino que, de acuerdo a sondeos de opinión, tendría una imagen positiva 15 puntos más alta que la del ingeniero.
