El joven que se mató este miércoles arrojándose de un edificio de 27 pisos no sería, finalmente, una víctima de Cromañón. Fuentes del Gobierno de la Ciudad señalaron que la Polícia Federal informó que Alejo Toscano, así se llamaba el joven de 21 años, estaba bajo tratamiento por problemas psicológicos hace dos años y había abandonado la terapia hace un mes.
La noticia de que un joven se había suicidado por los hechos de República Cromañón fue dada a conocer por un canal de noticias de televisión y circuló a través de varios medios televisivos y gráficos, como un reguero de pólvora encendido.
Según la versión gubernamental, Alejo nunca entró a República Cromañón porque no lo dejaron, ya que el lugar estaba lleno. "El joven no figura en las listas de heridos, de personas que recibieron asistencia psicológica y de personas que fueron al recital", añadieron voceros de la Secretaría de Salud porteña.
También afirmaron que "en la mañana del jueves, una señora hizo declaraciones radiales en las que señaló que su marido había muerto por el incendio en República Cromañón. La mujer es una interna de un hospital psiquiátrico de la provincia de Buenos Aires y sus dichos son fabulaciones".
