El presupuesto enviado para el 2007 -ya virtualmente rechazado- puede ser la excusa necesaria de una determinación política que pasea hace más de un mes por la cabeza del jefe de Gobierno, Jorge Telerman y es la de introducir variantes en la composición de su gabinete para afrontar la elección porteña del año entrante.
En una reunión prevista para el día de hoy entre los máximos referentes de la Legislatura y el propio jefe porteño podría quedar sellada -para bien o para mal- la suerte del ministro de Hacienda, Guillermo Nielsen, impulsor del endeudamiento en la norma, aunque el rubio funcionario no se quedará de brazos cruzados y estará en plena negociación paritaria. Es sabido que el presupuesto enviado por el Ejecutivo no pudo hacer pie en Perú 130 y se encamina hacia un rechazo seguro, ya que los principales bloques porteños tienen un acuerdo implícito de votar un presupuesto equilibrado y sin déficit. Sobre todo en este año preelectoral, nadie quiere dejar estampada su firma aprobando el déficit del Estado.
Para esa misma hora el economista jefe de Hacienda convocó a paritarias a los principales dirigentes de SUTECBA, Patricio Datarmini, Alejandro Amor y Genaro Trovatto para discutir los principales puntos pendientes entre el Gobierno y sus trabajadores. Mientras estas dos reuniones se produzcan, en la histórica sede gremial de pedro Goyena, el mandamás de los municipales porteños Amadeo genta le ofrecerá su apoyo y la tribuna al ya seguro candidato del kirchnerismo, Daniel Scioli.
Por lo que se pudo filtrar de fuentes cercanas a Telerman ya habría una lista de posibles recambios para ese ministerio, y la misma estaría compuesta por Sergio Beros, secretario Legal y Técnico, Raúl Fernández, actual secretario general y con menos chances aparecería el ministro de Producción, Enrique Rodríguez. En caso que efectivamente se produzca el recambio, quien corre con ventaja es el primero de los nombrados, Sergio Beros, dirigente muy cercano al jefe porteño, en lo que denominan dentro del gobierno comunal "un esquema Felisa Miceli" en parangón con el gobierno nacional.
De los tres nombrados, el que podría generar mayor valor agregado al armado político que pretende el jefe porteño, es el "Colorado" Fernández, quien mantiene buen diálogo con los principales referentes legislativos. Su ascenso conllevaría la misión -además de manejar los fondos del Gobierno- la de armar un espacio similar al que representaba Fuerza Porteña en el 2003-, algo que ya realizó con éxito pero esta vez con Telerman al frente. En su contra, figura la hipótesis que si se diera este nombramiento, el mismo sería leído en Balcarce 50 como una declaración de guerra total contra el jefe de Gabinete, Alberto Fernández.
Un viejo anhelo de Bolívar 1, que es la de contar en sus filas con el dirigente peronista Juan Manuel Olmos fue analizada y descartada por la inviabilidad política que presenta en este momento. Olmos, de buena relación con el gobierno comunal y con el propio Nielsen, ya había rechazado al principio de la gestión una suerte de "jefatura de gabinete" del actual gobierno. Allegados al presidente de la Comisión de Presupuesto Legislativa negaron cualquier ofrecimiento por estos días pero adelantaron que no está en los planes de Olmos abandonar su cargo de legislador porteño.
La cuestión es que -como sucedió hasta el momento- Telerman será el que decida cuándo, cómo y quiénes son los entran y los que se van. Pero algo pareciera que ya se empezó a mover y el motor fue el presupuesto caído.
