La vicepresidenta Victoria Villarruel se ha visto inmersa en un nuevo episodio de controversia tras retuitear un mensaje que critica a la senadora Patricia Bullrich, provocando revuelo en las redes sociales. El tuit original, publicado por el activista Santino Dezzotti, incluía un video en el que Bullrich se confunde al referirse al senador Eduardo Vischi como “diputado” durante un plenario en el Senado. El comentario del activista, “está gagá”, fue el detonante que Villarruel decidió amplificar en sus redes.
La exministra de Seguridad se disculpó en el video, explicando que su confusión se debía a su experiencia previa como ministra y diputada, pero nunca como senadora. Su error, sin embargo, no pasó desapercibido y fue motivo de burla en las redes, donde algunos internautas disfrutaron del “blooper”. A pesar de esto, Villarruel optó por retuitear el posteo, aunque se mostró más interesada en la foto de portada del activista que en el contenido crítico hacia su compañera de partido.
Pero después de generar revuelo con su retuit, Villarruel pronto realizó una aclaración, afirmando que su relación con Bullrich es buena y que están trabajando “muy bien” juntas en el Senado. “No creo en la política estéril de enemigos”, escribió, intentando desactivar la tensión creada por su anterior acción en redes.
Picante cruce | Victoria Villarruel respondió a un usuario “villarruelista” en Twitter que llamó “Gagá” a Patricia Bullrich: “Qué genial tu foto de portada. No se me ocurrió”, le dijo la vicepresidenta a un usuario que la tiene de foto de portada a ella con un sable. pic.twitter.com/V4AMqEvf7R
— ComunicAr (@Comunicar_Ar) December 19, 2025
Este intercambio no es un hecho aislado, ya que la relación entre Villarruel y Bullrich ha estado marcada por tensiones desde hace tiempo. En julio pasado, la entonces ministra Bullrich había criticado a Villarruel, acusándola de ser “cómplice del kirchnerismo” por su manejo de una sesión legislativa. Este tipo de conflictos internos evidencian las divisiones en el seno de La Libertad Avanza, el oficialismo actual.
Aprovechando su reciente ingreso al Senado tras las elecciones, Bullrich y Villarruel han tenido interacciones públicas que, aunque inicialmente conciliatorias, están matizadas por una historia de reproches mutuos. En una reunión privada entre ambas, Bullrich obsequió a Villarruel una Constitución Nacional, mientras que Villarruel respondió con una botella de vino Malbec, simbolizando las tensiones subyacentes.
Este episodio destaca las dinámicas complejas dentro del partido en el que ambas figuras políticas militan. A medida que se acercan decisiones legislativas importantes para el futuro del país, las rivalidades internas entre Villarruel y Bullrich podrían afectar el funcionamiento y la eficacia del Gobierno, dejando en el aire cómo se desarrollarán los próximos meses en el contexto político argentino.
