Viaje de Guzmán al FMI: en EE.UU hay “alta incertidumbre”

Viaje de Guzmán al FMI: en EE.UU hay “alta incertidumbre”

Ejecutivos del sistema financiero expresaron temores sobre la estabilidad económica y política del país.


A pocos días del viaje del ministro Martín Guzmán a Washington para la negociación con el FMI, los ejecutivos financieros y analistas políticos de Estados Unidos describen la situación económica e institucional de la Argentina como de “alta incertidumbre”.

Guzmán estará a principios de la semana que viene en esa ciudad para participar de la asamblea anual del Fondo Monetario Internacional (FMI) y de la cumbre de ministros del G20.

Además, junto con el representante argentino ante el Fondo, Sergio Chodos, se reunirá con la debilitada directora gerente, Kristalina Georgieva, y con los negociadores del Departamento del Hemisferio Occidental, Julie Kozack y Luis Cubeddu. No se descarta que pueda pasar unas horas por Nueva York para dialogar con inversores de Wall Street.

Mientras tanto, en la capital de EEUU y en Manhattan eligieron utilizar en diálogo con Infobae términos prudentes para referirse a la coyuntura argentina, aunque en voz baja temen que se cumplan sus peores pronósticos. Palabras que hace tiempo habían salido del vocabulario –como una inflación extremadamente acelerada y el riesgo político respecto del gobierno de Alberto Fernández– volvieron a mencionarse en los círculos externos que están atentos a las difíciles circunstancias del país.

Desde Nueva York, el socio de Mogador Capital, Guillermo Mondino, sostuvo que el escenario “generalizado es de incertidumbre. Nadie sabe qué va a pasar en los próximos meses y todo el mundo está en wait and see. Nadie se anima a decir que Argentina se desmorona, pero tampoco nadie está listo para decir que en dos meses hay acuerdo con el Fondo, que puede tener un programa económico ordenado, que el Gobierno se alinea y que la sociedad lo tolera. Por ahora, Argentina es pura incertidumbre”.

Por su parte, el ex director del FMI para América latina, Claudio Loser, dijo que “Georgieva tiene mucho interés en cerrar el capítulo de Argentina porque es el deudor más grande del organismo y estaría dispuesta a llegar a un acuerdo no tan estricto. Pero como ha avanzado la investigación respecto de las irregularidades de ella en el Banco Mundial, se debilitó mucho su capacidad de influencia sobre los directores del G7, aunque no sé si eso significa que vaya a renunciar”.

El director del programa América Latina del Woodow Wilson Center y ex director para América del Sur del Consejo de Seguridad Nacional de Barack Obama, Benjamin Gedan, dijo que “los resultados de las PASO fueron bastante alentadoras para inversores en el exterior que prefieren las políticas pro mercado de la oposición. Horacio Rodríguez Larreta es visto como una figura pragmática y razonable que mejoraría el clima de inversiones. Mientras tanto, las divisiones dentro de la coalición, y en el Congreso, hacen menos probable un giro dramático hacía políticas más estatistas durante los próximos dos años”.

En tanto, el veterano ejecutivo de Wall Street Arturo Porzecanski, señaló a Infobae que existen tres escenarios para pensar el viaje de Guzmán a Washington:

Primer escenario: “A principios del año que viene, el gobierno decide cambiar de rumbo y adopta un plan de emergencia de estabilización económica y reforma estructural que no sólo pasa el examen del FMI, sino que también atrae el apoyo de al menos algunos diputados y senadores de la oposición. Es igualmente importante que el plan de estabilización induzca la confianza de los inversores y mejore el acceso del gobierno a los mercados de capitales voluntarios, permitiendo reducir la dependencia de la financiación del banco central de cualquier necesidad de endeudamiento fiscal restante. Este plan refuerza la recuperación económica del país, frena la inflación y apoya la moneda argentina”.

Segundo escenario: “Argentina y el Fondo se mantienen alejados en cuanto a los términos y condiciones de un acuerdo largo porque no hay respaldo político para el tipo de políticas económicas ortodoxas que serían vistas como una rendición nacional por los principales partidarios del peronismo. La relación se rompe y el gobierno de Fernández incumple sus pagos al FMI. Sin duda, esta ruptura sería muy problemática para ambas partes. Varios países han dejado de pagar al FMI en décadas pasadas, pero sobre todo en los años ochenta y noventa, durante breves períodos y por pequeñas cantidades. Sin embargo, un impago, por no hablar de uno prolongado, por parte de Argentina del mayor préstamo del Fondo de la historia sería una enorme vergüenza para la institución”.

Tercer escenario: “El gobierno ofrece al FMI sólo modestos ajustes fiscales y monetarios y tímidas reformas estructurales, respaldadas por una amenaza no muy velada de abandonar y dejar de pagar si su oferta es rechazada, y la dirección del FMI y sus principales accionistas deciden seguir adelante y aprobar un nuevo préstamo. Este escenario, de un programa de estabilización y reforma del FMI ‘más amable y gentil’, pero mucho menos prometedor, tiene dos ventajas”.

Por último Porzecanski admitió que “ya vimos un anticipo de lo que podría pasar con el FMI con el Club de París, cuyo pago final se postergó hasta marzo próximo; ¡Ni Macri le pagó al Club de París! Sería una vergüenza terrible que no haya acuerdo, mientras también tambalea Georgieva”.

Qué se dice del tema...