Ese déficit histórico comenzó a revertirse recientemente, gracias a la lucha vecinal, que consiguió la expropiación de un terreno para convertirlo en espacio verde. Sin embargo, los vecinos no se conforman con un solo lote y ahora redoblan la apuesta: impulsan un nuevo proyecto para sumar otra plaza, en la esquina de Emilio Lamarca y San Blas.
El reclamo acaba de obtener un respaldo clave: la Junta Comunal 11 firmó por unanimidad el pedido, para elevarlo a la Legislatura porteña, donde los vecinos esperan que prospere el tratamiento.
“Nos mueve querer vivir en un ambiente saludable y seguir disfrutando de nuestro querido barrio, siendo partícipes de una mejora histórica, como sería la concreción de espacios verdes públicos, con arboledas frondosas y suelo absorbente, en donde podamos disfrutar un poco del aire libre con familiares, amigos y vecinos”, explicaron los integrantes del grupo “Una plaza para Villa Santa Rita”.
La iniciativa apunta a la adquisición de un terreno privado, ubicado en Emilio Lamarca 1702, esquina San Blas. El lote tiene 605 metros cuadrados y se encuentra abandonado, pero en venta desde hace años. Según el relevamiento barrial, dentro del predio crece vegetación espontánea y se conservan varias especies arbóreas. Además, hay cinco árboles que ya forman parte del paisaje cotidiano de la cuadra.
La propuesta incluye también la posibilidad de incorporar la propiedad lindera, lo que permitiría sumar unos 200 metros cuadrados adicionales. De prosperar, el espacio total se acercaría a los 800 metros cuadrados, superficie pequeña si se la compara con otras plazas de la Ciudad, pero de un valor incalculable en un barrio con carencia de suelo verde.
El antecedente que entusiasma al grupo vecinal es la creación, en un lote situado en Álvarez Jonte 3222, de la primera plaza para el barrio de Villa Santa Rita. El proceso duró muchos años y demandó el esfuerzo y la perseverancia de los vecinos. En marzo del 2023 fue aprobada la ley de expropiación en la Legislatura y en abril de este año quedó abierta al público.
Si bien aquella jornada fue celebrada por los habitantes de la Comuna 11 y de las lindantes, los vecinos consideraron, respaldado por estándares ambientales, que el espacio verde continuaba siendo deficitario en el barrio.
El pedido vecinal se ampara en la Constitución de la Ciudad de Buenos Aires, que garantiza el derecho a un ambiente sano y en el Plan Urbano Ambiental (Ley 2930), que en su artículo 9 ordena al Gobierno porteño incrementar, recuperar y mejorar los espacios públicos.
En particular, el punto 4 de ese artículo establece la obligación de “promover la creación de nuevas plazas, plazoletas y patios de juego en relación adecuada a la densidad poblacional de las diversas zonas”.
Con menos de 40 mil habitantes y una superficie de 2,3 kilómetros cuadrados, Villa Santa Rita es uno de los barrios menos conocidos de Buenos Aires. Mantiene todavía la fisonomía de casas bajas y pasajes, que lo distingue de sus vecinos Villa del Parque, Flores o Floresta. En sus 56 calles, 32 son cortadas o pasajes, lo que le da un aire de pueblo en medio de la gran ciudad.
El dato es contundente: la Organización Mundial de la Salud recomienda un mínimo de 9 a 15 metros cuadrados de espacio verde por habitante, con acceso a no más de 300 metros desde cada hogar. En Villa Santa Rita, contando la plaza de Álvarez Jonte al 3200, cada vecino apenas dispone de 22 centímetros cuadrados de verde. Una cifra simbólica que grafica la magnitud del déficit.
“Para llegar a la plaza de Jonte, los chicos de la zona central tienen que caminar 15 o 20 cuadras. Lo mismo pasa con los adultos mayores. No se puede seguir ignorando que Santa Rita necesita más plazas, no una sola”, remarcaron los vecinos.
La lucha de los vecinos se apoya en fundamentos ambientales y sanitarios. Los espacios verdes cumplen un rol vital: ayudan a mitigar el efecto isla de calor, absorben dióxido de carbono, moderan la temperatura y ofrecen un lugar de esparcimiento seguro.
En un contexto de cambio climático y de aumento de olas de calor en la Ciudad, contar con plazas ya no es un lujo, sino una necesidad que, a su vez, se hizo más evidente durante la pandemia del coronavirus. Cuando comenzó la etapa de menos restricciones, las personas hicieron de los espacios verdes un espacio vital.
Un reclamo con mucha historia y lo que está en juego
La demanda de una plaza en Villa Santa Rita no es nueva. Documentos históricos la ubican ya en los planes urbanos de fines del siglo XIX. En un mapa porteño de 1892 elaborado por Pablo Ludwig aparece un proyecto de espacio verde en el barrio, que nunca se concretó.
En 1927, el diario El Eco de Parque reflejaba el pedido de la Corporación Mitre para destinar una manzana a plaza pública entre las calles Álvarez Jonte, Argerich, Indio (actual Elpidio González) y Helguera. A lo largo de las décadas, distintos proyectos y promesas se sucedieron sin resultados. La urbanización avanzó, las casas se multiplicaron y el espacio verde jamás llegó.
Hoy los vecinos impulsan tres proyectos en simultáneo para sumar nuevos lotes y evitar que terminen en manos de desarrolladores inmobiliarios. “Si no se expropian, serán edificios que solo aumentarán el cemento, la densidad poblacional y el calor urbano”, advierten.
Para evitarlo, piden que el Poder Ejecutivo cumpla con el mandato del Plan Urbano Ambiental y que los legisladores traten con urgencia las iniciativas.
“Los cambios en el mundo y en la Ciudad de Buenos Aires en particular, hacen cada vez más urgentes y necesarios los espacios verdes públicos. Las planificaciones urbanísticas, las recomendaciones de organismos internacionales, los estudios científicos y médicos, así como las leyes, nos dan la razón”, argumentaron los vecinos.
En tanto, la Junta Comunal 11, firmó una resolución en la cual se aprobó la propuesta de los vecinos para el lote situado en Emilio Lamarca. “Continuamos trabajando para sumar espacios verdes y de calidad en el barrio de Villa Santa Rita, partiendo de la experiencia del caso exitoso anterior de la plaza inaugurada recientemente”.
En ese sentido, señalaron que, junto a vecinos, la Legislatura y el Ejecutivo se podrá “hacer de Villa Santa Rita un barrio más verde”, tal cual fue prometido por diferentes gestiones que se sucedieron en la ciudad.