El triunfo contundente de La Libertad Avanza (LLA) en las recientes elecciones generó un reencuentro telefónico entre Javier Milei y Mauricio Macri, una llamada breve pero simbólica que marca el inicio de una nueva etapa de diálogo entre ambos. Desde la Casa Rosada, la conversación tuvo lugar al mediodía del lunes, duró aproximadamente diez minutos y se produjo a partir del resultado electoral que confirmó el liderazgo del espacio de Milei.
El intercambio se sumó a una serie de mensajes cruzados a través de redes sociales que ya habían tenido lugar el domingo por la noche, justo luego de conocerse los primeros datos oficiales del escrutinio. Durante su discurso de celebración, Milei recordó la reunión que en su momento convocó Macri en Acassuso, momento en el cual decidieron unir fuerzas para “derrotar al populismo”, aludiendo así a un vínculo de larga data entre ambos sectores.
Macri, por su parte, hizo un gesto de felicitación público hacia Milei y hacia los votantes que apostaron al cambio. “Mis felicitaciones a LLA, al Presidente Milei y, especialmente, a todos los argentinos que hoy apoyaron el cambio”, señaló, subrayando la dimensión electoral del acto. Milei respondió con un “Muchas gracias, presi”, lo que refleja un clima más informal y directo entre los líderes.
El contexto del diálogo tiene raíces en la reunión que protagonizaron a fines de septiembre y principios de octubre en la residencia presidencial de Olivos, donde Macri y Milei, junto al jefe de Gabinete Guillermo Francos, se sentaron para conversar sin que se trascendieran grandes detalles. Según fuentes políticas, Francos ha actuado como interlocutor para limar las asperezas que surgieron en el contexto de negociaciones por alianzas y listas de candidatos.
🗳️ ELECCIONES LEGISLATIVAS 2025
Después de votar, Mauricio Macri le envió un mensaje a Javier Milei: “Si necesita algo me va a llamar, yo no espero nada”.https://t.co/0hzPhmm9m7 https://t.co/GPaS1gvrsS pic.twitter.com/IyvuwtEfVB
— bardeonews (@bardeonews) October 26, 2025
Durante su alocución en el búnker de La Libertad Avanza (LLA) instalado en el Hotel Libertador, Milei resaltó que “durante los próximos dos años tenemos que afianzar el camino reformista que emprendimos”, y aseguró que el nuevo Congreso será clave para asegurar un cambio de rumbo en Argentina. En ese marco, invitó a gobernadores y legisladores de distintos espacios a sumarse al debate, exhibiendo una vocación de amplificación de su proyecto más allá de su propio bloque.
Macri, en tanto, había planteado antes de las elecciones la necesidad de que Milei convoque al “diálogo, con humildad y honestidad” y acepte una oposición constructiva dispuesta a presentar propuestas desde todo el país. Un mensaje que ahora toma nueva relevancia ante el hecho de que, aunque LLA reforzó su posición, aún depende de alianzas parlamentarias para avanzar con un paquete de reformas.
El escenario se abre ahora con una combinación de garantías electorales para el oficialismo y necesidades políticas de construir consensos. La invitación explícita de Milei a dialogar con gobernadores y legisladores de otras fuerzas —y el gesto de Macri de retornar el vínculo— sugieren que, más allá del triunfo, se prepara una fase de negociación clave. Lo que está en juego es cómo se traducirán los votos en leyes, y cómo Milei convertirá el respaldo electoral en capacidad de acción en el Congreso.




