En un giro que busca apaciguar las tensiones internas del oficialismo, Santiago Caputo, uno de los asesores más cercanos al presidente Javier Milei, minimizó hoy la reciente polémica con el jefe de Gabinete, Guillermo Francos. Caputo evitó profundizar en las diferencias públicas que habían surgido entre ambos por cuestiones de estrategia política, y prefirió enfatizar la unidad del equipo libertario en un momento clave para la gestión.
Sin embargo, el consultor político, conocido por su rol clave en la campaña presidencial de Milei, aclaró que no hay fracturas irreparables. “Son debates normales en cualquier equipo de alto rendimiento; lo importante es el objetivo común”, sostuvo Caputo, bajando el tono a lo que algunos medios habían calificado como una “guerra fría” en La Casa Rosada.
Caputo, quien ha mantenido un perfil bajo desde la asunción de Milei pero con influencia constante en las decisiones estratégicas, reveló que no descarta sumarse formalmente al Gabinete en el futuro cercano. “Estoy donde el Presidente me necesite. Si eso implica un lugar oficial, lo evaluaré con él”, expresó, dejando entrever que su expertise en marketing y análisis de datos podría ser clave para las batallas electorales venideras. Esta apertura contrasta con su postura inicial de mantenerse en las sombras, evitando el escrutinio público.
FRANCOS SOBRE SANTIAGO CAPUTO: “Hay algunos que asesoran y no tienen responsabilidades”. Lo dijo en @infobae horas después que el asesor presidencial lograra demorar la ley de DNU. pic.twitter.com/9tkcCTWCVa
— Ezequiel Spillman (@ezequielmauro) October 10, 2025
El contexto de esta declaración llega en medio de un Gobierno que enfrenta desafíos económicos y políticos, con Milei apostando a una renovación de su equipo para consolidar el ajuste fiscal. Fuentes cercanas al Ejecutivo indicaron que Caputo ha participado en reuniones informales sobre la reforma del Estado, donde su visión disruptiva ha sido valorada. No obstante, su eventual incorporación generaría debate, dado el estilo confrontacional que ha marcado su trayectoria.
Francos, por su parte, no emitió comentarios directos sobre los dichos de Caputo, pero en círculos del Gobierno se percibe un esfuerzo por recomponer puentes. El jefe de Gabinete ha sido el principal interlocutor con el Congreso y los gobernadores, un rol que Caputo elogió indirectamente al reconocer “el trabajo incansable de quienes están en la primera línea”. Esta moderación podría ser un guiño para evitar que las internas debiliten la imagen de un Milei unificado ante la opinión pública.
El gesto de Caputo no solo descomprime una tensión que amenazaba con escalar, sino que inyecta incertidumbre y expectativa en el armado del Gabinete. El Presidente, fiel a su estilo, aún no se ha pronunciado, pero el tablero ya se mueve.