El analista político Diego Reynoso, comentó que “antes de lo sucedido en la Capital, el desdoblamiento era la táctica predominante”, refiriéndose al enfoque adoptado por diversas provincias para separar sus elecciones del calendario nacional y alcanzar buenos resultados. Santa Fe, Chaco, Jujuy y San Luis fueron algunos ejemplos de éxito.
No obstante, los resultados en la Ciudad de Buenos Aires, donde el oficialismo local ocupó el tercer lugar, alteraron el panorama. “Fue una estrategia de pinzas que dejó a Jorge Macri con apenas el 15 o 16% de los votos”, aclaró. Esto generó dudas sobre si es conveniente nacionalizar o provincializar las elecciones en Buenos Aires.
El posible armado conjunto entre La Libertad Avanza (LLA) y el Pro representa una amenaza real para el PJ bonaerense. “En siete de las ocho secciones electorales, sumando los votos de La Libertad Avanza (LLA) y Pro, derrotarían al peronismo”, advirtió Reynoso.
Solo la tercera sección electoral, histórico bastión peronista, parece resistir. Allí, Cristina Kirchner mantiene una fuerza competitiva, lo que alimenta versiones de que podría ser candidata en ese distrito si no hay lista única.
“La única alternativa de enfrentar es tener un frente común”, aseguró el analista. Para Reynoso, ya no es viable sostener la idea de elecciones separadas. Si se provincializan, el peronismo corre riesgo de ser derrotado en la mayoría de las secciones.
El gobernador Kicillof resiste la idea de ceder ante Cristina unificando los comicios. “Kicillof siente que este es el momento para desmarcarse”, dijo Reynoso.
Aunque advirtió: “Por no quedar subsumido a la conducción de Cristina, arriesga mucho futuro”.
El riesgo de una derrota y sus consecuencias
Para Reynoso, la disputa interna entre Cristina y Kicillof excede lo personal. Es una cuestión estratégica de supervivencia política. “La única forma de quedar ganador va a ser ganar la elección”, remarcó con contundencia.
Si el PJ va dividido, no solo se expone a perder la elección legislativa, sino que compromete el futuro de sus principales figuras. “La carrera presidencial de Axel Kicillof también queda machucada, mellada, erosionada”, sentenció Reynoso, dejando claro el nivel de la apuesta.