Entre enero de 2024 y enero de 2025, un total de 12.259 empresas se vieron obligadas a cerrar en Argentina, lo que dejó el número de unidades productivas en 499.371, según datos del Observatorio IPA. Esta situación, resultado de la recesión, la alta presión fiscal y la competencia desleal provocada por importaciones, evidencia una crisis severa en el sector industrial. Daniel Rosato, presidente de Industriales Pymes Argentinos (IPA), expuso que las políticas vigentes no brindan protección a las fábricas nacionales, que enfrentan desventajas frente a productos importados que reciben subsidios y financiamiento externo.
Rosato señaló que, aunque las condiciones macroeconómicas son necesarias, no son suficientes para asegurar la competitividad de las pymes en Argentina. Criticó la ausencia de un plan gubernamental sólido para el sector productivo, advirtiendo que el acelerado ritmo de cierres de empresas es preocupante y podría llevar a una crisis social debido al incremento del desempleo. La disminución del consumo y las desigualdades fiscales agravan la situación, impulsando a las empresas a reducir su plantilla de empleados formales.
A pesar de un crecimiento económico interanual del 5,6% en marzo de 2025, la recuperación muestra disparidades y se apoya en áreas como la intermediación financiera (+29,3%), mientras que la industria, la construcción y el empleo permanecen rezagados. El empleo registrado disminuyó un 0,8%, con la pérdida de 74.811 puestos, afectando principalmente a la Administración Pública, la industria y la construcción.
📊 El Observatorio IPA presentó su Informe de Coyuntura Industrial PYME de junio.
El presidente de Industriales Pymes Argentinos (IPA), Daniel Rosato, le exigió al Gobierno nacional definir e implementar una política destinada al sector productivohttps://t.co/ERBBH8i53t pic.twitter.com/ba2a1ozQjs
— IPA (@IPAPYMES) June 25, 2025
Si bien la producción industrial experimentó un aumento del 8,5% en abril, este avance se produjo sobre una base muy baja, y sectores como Químicos y Metales siguen enfrentando retrocesos.
Las MiPyMEs en el sector manufacturero se ven limitadas por la demanda y la dificultad para acceder a financiamiento, lo que las mantiene operando muy por debajo de su capacidad. A pesar de que la recuperación económica se ve impulsada por el agro, el petróleo y el sistema financiero, esto no logra reactivar el consumo ni el conjunto de la industria. Aunque la inflación está en descenso, no se traduce en un aumento de la demanda, y el incremento de reservas se debe a la deuda en lugar de a las exportaciones. Rosato abogó por un modelo económico que priorice la producción nacional y que genere un valor agregado, evitando así un crecimiento que beneficie únicamente a sectores no productivos.
El análisis del Observatorio IPA señala que la economía se expande sobre fundamentos inestables, con una estabilización parcial que no beneficia a la mayoría de los hogares. Sin inversión en sectores productivos ni un aumento en los ingresos reales, la crisis que afecta a las pymes continúa, evidenciada por la creciente brecha entre las grandes corporaciones y las pequeñas industrias. La ausencia de políticas que fomenten la competitividad y la creación de empleo pone en riesgo la equidad y podría perpetuar una situación de recuperación incompleta.