Menem aspira a crear un suprabloque que agrupe a los aliados y les dé la capacidad de negociar espacios en las comisiones legislativas. La idea es mantener la cohesión entre los distintos sectores políticos, especialmente en un contexto donde algunos grupos han expresado dudas sobre su continuidad dentro de la coalición oficialista. Este interbloque serviría para contener a los aliados y evitar tensiones innecesarias.
Uno de los desafíos que enfrenta Menem es la relación con el Pro, que ha sufrido una reducción significativa en su bancada. La reciente salida de varios diputados hacia La Libertad Avanza (LLA) ha dejado al Pro con solo 16 integrantes, lo que ha generado un ambiente tenso. Sin embargo, tras conversaciones entre Menem y Cristian Ritondo, se ha llegado a un pacto de convivencia que promete respetar las identidades partidarias, aliviando así las tensiones.
Durante años se usó el miedo para frenar los cambios. Pero la realidad es innegable: más de 8 millones de argentinos trabajan sin derechos. Con el rumbo claro que marca el Presidente @JMilei, avanzamos en una modernización laboral que genere oportunidades reales de progreso. pic.twitter.com/5tTRdcQ1IU
— Martin Menem (@MenemMartin) November 10, 2025
Por su parte, la UCR también se reestructura. Varios diputados electos por La Libertad Avanza (LLA) se integrarán al bloque radical, lo que podría fortalecer la posición de la UCR en el nuevo Congreso. Además, algunos gobernadores radicales están buscando reanudar el diálogo con el gobierno nacional, lo que podría facilitar la creación de un bloque unido y cohesionado.
El nuevo Congreso se perfila con una polarización notable, donde el oficialismo podría alcanzar alrededor de 120 diputados, mientras que la oposición se mantendría en torno a 108. Esta dinámica obligará a Menem a buscar apoyos adicionales, especialmente de los gobernadores que buscan garantizar la gobernabilidad en sus provincias.
Finalmente, Menem tiene la mirada puesta en fracturar a la oposición, específicamente a Unión por la Patria (UP), lo que le permitiría consolidar su dominio en la Cámara. Su estrategia incluye acercamientos a mandatarios peronistas que han mostrado disposición a dialogar sobre reformas, lo que podría cambiar el panorama legislativo en los próximos meses.
