Desde Europa, donde cumplía compromisos personales, Mauricio Macri optó por una participación discreta en el escenario político nacional. Aunque ha mantenido distancia de los focos mediáticos, el expresidente emitió un video de apenas 18 segundos para respaldar a Juan Martín, candidato del Pro a senador en Río Negro, en una jugada que implica varias lecturas.
En ese mensaje breve, Macri pidió a los rionegrinos votar por “la gente idónea y las ideas correctas” para disputar bancas en el Congreso, dando lugar a lo que denominó una “gran patriada amarilla” para impulsar reformas estructurales. El mensaje, aunque conciso, marca una intervención simbólica en la campaña del Pro frente a La Libertad Avanza (LLA).
La elección en Río Negro refleja tensiones internas previas: se había acordado una alianza entre Pro y La Libertad Avanza (LLA), pero el reparto de lugares en las listas provocó la ruptura del pacto. Desde entonces, Juan Martín criticó abiertamente a Lorena Villaverde, candidata por La Libertad Avanza (LLA), a quien calificó duramente. Más allá del respaldo puntual, Macri no ha programado participación pública significativa antes de los comicios.
Parece q @mauriciomacri apoya en Rio Negro a un candidato puro del pro contra la socia de fred Machado candidata de Milei….
Que mojada de oreja libertarios jajajaja
Es por ahiiiiii pic.twitter.com/0vhU4y7g73— Comedia argentina (@cositopolitico) October 14, 2025
La estrategia de Macri indica una advertencia hacia terceras vías que podrían beneficiar al kirchnerismo. En su entorno, interpretan que sectores que se mostraban disidentes podrían decantarse por alternativas que terminen diluyendo votos “anti-gobierno”. Así lo sostiene también Fernando De Andreis, aliado de confianza, en una publicación que complementó el gesto de Macri.
El Pro enfrenta desafíos similares en otros distritos: en Chubut, el gobernador Ignacio “Nacho” Torres ya se posicionó en contra de una alianza con La Libertad Avanza (LLA); en Santa Fe, Gisela Scaglia encabeza una lista por Provincias Unidas; y en Córdoba, la fragmentación dentro del espacio amarillo se acentúa con múltiples listas competidoras. Estas divisiones internas hacen más compleja la articulación de un bloque opositor unificado frente al oficialismo.