En un movimiento estratégico que podría redefinir el control legislativo en Argentina, el gobierno oficialista está trabajando para arrebatarle al peronismo la primera minoría en la Cámara de Diputados. Actualmente, La Libertad Avanza (LLA) cuenta con 91 bancas, mientras que Fuerza Patria, el bloque peronista, tiene 96. La posibilidad de que algunos gobernadores rompan con el kirchnerismo es un factor crucial en esta lucha por la primacía legislativa.
Desde el punto de vista parlamentario, ser la primera minoría permitiría al oficialismo reclamar la presidencia de más comisiones, otorgando mayor representación y control sobre los debates. La Cámara de Diputados cuenta con 45 comisiones permanentes, donde se analizan y dictaminan los proyectos de ley, y tener una mayor presencia en estas instancias podría cambiar significativamente la dinámica legislativa.
El reglamento de la Cámara no especifica cómo se deben repartir los lugares en las comisiones, pero el artículo 105 establece que la designación debe reflejar la composición del cuerpo legislativo. Esto abre la posibilidad de que, si La Libertad Avanza (LLA) supera a Fuerza Patria, un par de diputados más en comisiones clave podrían impactar considerablemente en los debates.
Hemos caminado junto al presidente @JMilei desde el primer día, cuando sólo había coraje y convicción.
Llegamos al Congreso en 2023, junto a @PatoBullrich para pelear la batalla que había que pelear.
Hoy, damos un paso más: aceptamos la invitación de @LLibertadAvanza.
Porque… pic.twitter.com/Aaw9XbPMdS— Mariano Campero 🇦🇷 (@mariano_campero) November 19, 2025
Los libertarios también están trabajando para maximizar su influencia a través de alianzas estratégicas. “No es tan lineal, porque en algunos casos puede convenir sumar más aliados de otros bloques”, afirmaron desde el oficialismo, indicando que la política de alianzas es crucial para fortalecer su posición.
La reciente reconfiguración del bloque oficialista ha incluido diputados que anteriormente pertenecían al Pro y a otros sectores. Este cambio ha sido representativo del impacto de los resultados electorales en octubre, que permitieron al oficialismo sumar nuevos aliados y consolidar su posición en el Congreso.
Finalmente, el futuro del bloque peronista dependerá de los movimientos en los espacios provinciales. Los gobernadores de Catamarca y Santiago del Estero están bajo la mira, ya que una fractura con cualquiera de ellos podría significar una victoria decisiva para el oficialismo. La atención está puesta ahora en cómo se desarrollarán estas negociaciones en las próximas semanas.




