La jefa del bloque de La Libertad Avanza en la Legislatura porteña, María del Pilar Ramírez, presentó un proyecto de ley que propone modificar el Código Electoral porteño con el objetivo de garantizar la simultaneidad entre las elecciones locales y las nacionales. La iniciativa, según argumenta la legisladora en sus fundamentos, apunta a optimizar recursos públicos, promover mayor transparencia y mejorar la participación ciudadana en los procesos electorales.
El proyecto modifica los artículos 58 y 60 de la Ley N.º 6031, texto consolidado por la Ley N.º 6764, estableciendo que las elecciones generales y la segunda vuelta en la Ciudad deberán realizarse en la misma fecha que las nacionales, el cuarto domingo de octubre del año electoral. Además, se introduce la obligación para el Poder Ejecutivo local de adherir al régimen de simultaneidad o concurrencia estipulado por la Ley Nacional Nº 15.262 o la norma que la reemplace en el futuro.
En los fundamentos, la autora del proyecto señala que la fragmentación de los calendarios electorales perjudica la equidad de la contienda democrática y genera ventajas indebidas para los oficialismos. “Unificar los comicios permite evitar el uso arbitrario de la convocatoria electoral como herramienta de manipulación institucional”, advierte el texto.
Uno de los argumentos centrales tiene que ver con el costo económico de realizar elecciones en fechas diferentes. La legisladora sostiene que la unificación de jornadas electorales reduce considerablemente el gasto estatal y mejora la eficiencia logística. A su vez, resalta que la dispersión electoral genera confusión en la ciudadanía y contribuye al ausentismo en las urnas, como ocurrió el pasado 18 de mayo, donde solo participó el 53% del padrón, la cifra más baja en la historia electoral de la Ciudad.
El proyecto también habilita la posibilidad de utilizar un sistema de votación distinto al nacional para la elección local, siempre en el marco de la simultaneidad. Asimismo, prevé que el Ejecutivo porteño pueda adherir a normativas nacionales complementarias que regulen el financiamiento de campañas y la participación de extranjeros en el proceso electoral.
La propuesta ya comenzó a generar debate dentro del recinto legislativo porteño, donde se anticipa una discusión intensa sobre los mecanismos y tiempos de implementación. Desde el despacho de Ramírez confían en que el proyecto será bien recibido por distintas fuerzas políticas, en tanto representa un paso hacia una democracia más equitativa, eficiente y participativa en la Ciudad de Buenos Aires.
