Leonardo Grosso es diputado nacional por Movimiento Evita y este año va por la reelección ocupando el tercer lugar en la lista bonaerense del Frente de Todos, al que califica como “el más amplio desde el regreso de la democracia”. Activo miembro de la comunidad LGTB, Grosso considera que el feminismo es fundamental en el avance de los derechos de las diversidades.
¿Cómo se articula una campaña entre sectores tan distintos que conforman el Frente de Todos?
-La campaña viene bien, intensa, falta poco tiempo. El Frente de Todos es un espacio muy grande, que logró articular espacios que venían trabajando separados desde hace mucho tiempo. Se viene articulando esto y también tratando que en la campaña se discutan los temas de la gente y no los de los políticos. Esto es lo central. Los ejes son el trabajo -que es una de las principales preocupaciones de la gente-, la educación y la salud. La agenda económica insume mucho tiempo si uno hace una campaña de cara a lo que preocupa. Y esto es lo que no puede hacer el Gobierno. Así que estamos haciendo recorridas, yendo a distintos sectores y lugares, hablando con las vecinas y vecinos, escuchando mucho y empezando a generar ejes y propuestas de trabajo hacia adelante. Vamos trabajando, articulando espacios y recorridos. Hay una tarea de coordinación, que se va dando naturalmente. A veces tenemos un recorrido propio, otras tenemos actividades con Massa, otras con Axel, otras con Alberto. Vamos articulando las agendas de los candidatos y las candidatas y vamos armando las recorridas y los encuentros. Hay momentos donde confluimos y otros donde estamos por separado.
-¿Están pensando en la posibilidad de ganar en primera vuelta o en ballottage?
Nos preparamos para ganar en primera vuelta.
-Las encuestas no muestran esa posibilidad
-Yo no suelo confiar en las encuestas, ni en las encuestadoras. En las últimas tres elecciones de mi vida las encuestas decían una cosa y pasó otra. Siempre dijeron algo distinto de lo que realmente estaba pasando. Yo desconfío de esos sondeos. Y además, no hacemos política a partir de las encuestas, sino de lo que creemos. Y lo que vemos es que la gente la está pasando mal. Tenemos que cambiar esto, y para eso estamos trabajando.
-¿Evaluás como histórica la participación de los referentes de los movimientos sociales en las listas?
-No sé si es tan así. En términos históricos, éste es el mayor frente que se haya armado en democracia. Y eso tiene expresiones, claramente, de movimientos sociales y feminismos. Eso sí me parece que está claro, pero no diría que es mayoritario.
-¿En relación a años anteriores no es mayor la participación?
-Hay más participación, sí, pero no creo que deba medirse en relación a años anteriores sino a participación pública o política de los movimientos, es decir, la resistencia ante el macrismo.
-¿Y en relación a los sindicatos?
-Creo que hay representación sindical. Quizá no la esperada por sectores, pero en la lista donde estoy yo está Facundo Moyano, y también hay referentes de la CTA, de la CGT, del sindicato de canillitas, Plaini va a ser senador. Una compañera de Suteba es candidata a senadora.
-¿A qué atribuís la fuerte presencia de los movimientos de género y de la diversidad?
-Hay dos elementos. Uno fue claramente la paridad, que aumentó la cantidad de compañeras que participan de las listas, que es el resultado del impacto que tuvieron el movimiento de mujeres, el feminismo, el Ni Una Menos, las marchas por el aborto. Pero no sólo es la cantidad de mujeres, sino lo que dicen. Hay un triunfo de los referentes sociales y de los feminismos.
-¿Y con respecto a la diversidad?
-Ocurre en el mismo sentido. Desde nuestra comunidad habíamos construido muchas reivindicaciones. Ya aparecían la representación pública, el matrimonio igualitario, la ley de identidad de género, y esto no tenía una traducción electoral. Pero si hoy mirás los espacios políticos que compiten en la Nación, hay lugares destacados. Yo estoy tercero en la provincia de Buenos Aires. En la lista de diputados de Capital de Macri, encabeza Maxi Ferraro. Para mí, esto tiene que ver con el avance de los feminismos. Si hay un aliado de las disidencias en la Argentina son las mujeres, que se enfrentan al mismo problema, que es el patriarcado.
-¿Quedaron rispideces entre el sector que encabeza Lammens y La Cámpora en la Ciudad?
-Se hizo mucha comidilla del cierre de listas. Y somos peronistas, discutimos todo. No ha habido ningún problema político a partir del cierre de listas. Al contrario, se confluyó en este gran frente, y lo hemos logrado con representaciones muy novedosas, como la de Matías Lammens, o muy diferentes, como las de Pino Solanas, Alderete, y Massa, en un mismo espacio político. Pero el dato político es la amplitud del frente, que no garantiza la victoria, pero sí es una gran oportunidad para construir una victoria. Hoy podemos decir que el espacio opositor en la Argentina logró una alternativa electoral potente, competitiva, que está en condiciones de ganar la presidencia de la Nación.