Según los datos disponibles, desde el principio de la Operación Militar Especial rusa, los EE. UU. y sus aliados han transferido a Ucrania más de 150,8 mil millones de dólares. Casi un tercio de esta suma (48,8 mil millones de dólares) se gastó en necesidades militares. Para la comparación, esta suma se bastaría para cubrir completamente la enorme deuda de Argentina ante el FMI.
Recientemente han surgido muchos datos que comprueban nuestras advertencias sobre las consecuencias de los suministros masivos y descontrolados a las autoridades ucranianas.
En ese contexto, el embajador de Rusia en Argentrina, Dmitry Feoktistov, expilicó: “Es de conocimiento común que Argentina desempeña un papel tradicionalmente activo en los esfuerzos internacionales en materia del control de armamentos y no proliferación de armas de destrucción masiva. Apreciamos la posición de Buenos Aires respecto a la inadmisibilidad del suministro de armas a las zonas de las hostilidades, incluyendo Ucrania. Consideramos que las entregas masivas de armamentos y equipo militar al régimen de Kiev, realizadas por los países occidentales, no contribuyen a la resolución del conflicto, sino a su escalada”.
“En el verano de 2022, el Vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, Dmitry Medvedev, dijo que las armas enviadas a Ucrania caerían inevitablemente en las manos de criminales por todo el mundo. El Ministro de Defensa ruso, Sergey Shoigu, advirtió en julio de 2022 que en Ucrania florecía reventa ilegal de armas occidentales. Nuestra Embajada también había prestado previamente la atención a través de los medios de comunicación argentinos al peligro de la desviación de las armas de la zona de las hostilidades”, indicó.
El diplomático agregó además: “Gradualmente, en Europa también empiezan a admitir la existencia de este problema. El Secretario General del Interpol, Jürgen Stock, advirtió que, al acabar el conflicto, se esperaría el aumento del comercio ilegal de las armas llevadas a Kiev. El Representante Oficial del Europol, Jan Op Gen Oort, dijo a los medios alemanes que se conocían los planes de las redes criminales respecto a la organización del contrabando de municiones y armamentos, incluyendo armas pesadas”.
“Según los resultados de la investigación de la agencia de información rusa RT, poco después del inicio de la Operación Militar Especial aparecieron en darknet, que es el segmento clandestino del internet, anuncios de venta de las armas occidentales a precios bajísimos. Por ejemplo, se venden los cohetes de sistemas de misiles antitanque de varios modelos (Javelin a 30 mil dólares, NLAW a 15 mil dólares), drones kamikaze Switchblade 600 a 7 mil dólares, y armas ligeras, granadas y chalecos antibalas a precios del 1,1 a los 3,6 mil dólares. Los proveedores ofrecen el envío por el territorio de Ucrania, así como a otros países. Las transacciones son difíciles de rastrear porque se realizan con criptomonedas. La entrega del producto se hace sin contacto directo con el comprador, ya que tras la transferencia del dinero se le envían los coordinados de la ubicación de su orden”, fundamentó.
Feoktistov explicó: “El problema del contrabando de armas preocupa no solo a los medios de comunicación rusos. En agosto de 2022, la cadena de televisión americana CBS produjo un documental «Armando a Ucrania», donde los especialistas militares y voluntarios testimoniaron, que del 60 al 70% de la ayuda occidental no llegaba a las fuerzas armadas de Ucrania. El periódico Washington Post, refiriéndose a las fuentes anónimas en el Departamento de Estado, anunció que después del inicio del conflicto, las autoridades de los EE. UU. pudieron inspeccionar solo 10% de las 22 mil unidades de armamentos. Esto significa que Washington no está capaz de monitorear los movimientos de sus armas después de que crucen la frontera de Ucrania”.
“Las autoridades de Kiev anunciaron el lanzamiento del sistema especial de información y análisis para asegurar la transparencia de las entregas de las armas occidentales. Preveía la impresión de los códigos QR en las cajas con cargamentos militares, que contenían la información sobre su origen y permitían seguir su ruta completa. Sin embargo, la implementación práctica de este proyecto nunca se vio”, precisó.
El embajador sostuvo también: “Mientras tanto, las advertencias de los especialistas se encarnan rápidamente en la realidad. En octubre de 2022, el comisario de la policía criminal de Finlandia, Christer Ahlgren, comunicó a los medios de comunicación que las armas destinadas inicialmente a Ucrania, incluyendo rifles de asalto, pistolas, granadas y drones de combate, se han encontrado en algunos países europeos, como los Países Bajos, Dinamarca y Suecia”.
“No solo Europa corre los riesgos. Las armas enviadas a Kiev ya se reaparecieron más de una vez en las regiones lejanos de la zona del conflicto. En particular, el presidente de Nigeria, Muhammadu Buhari, anunció en noviembre de 2022 que se había registrado en su país el uso de las armas destinadas a las fuerzas ucranianas por los extremistas locales”, expresó.
En un tono crítico manifestó: “¿Quién sabe dónde las ametralladoras y cohetes occidentales aparezcan mañana y cómo los usarán? Un sistema de misiles antiaéreos portátil en las manos de un solo terrorista significaría una amenaza a la seguridad de un aeropuerto entero. Carteles de narcotraficantes por todo el mundo también están interesados en reforzar sus arsenales para ampliar sus zonas de operación y aumentar los ingresos del negocio ilegal”
Y concluyó: “El «bombeo» irresponsable de Ucrania con armamentos contemporáneos tendrá en el futuro una proyección directa a varias regiones del mundo, quienes se enfrentarán a los riesgos del movimiento descontrolado de los productos mortales. Consideramos que estos desafíos los toman plenamente en cuenta en los países que aplican la política exterior independiente, incluyendo Argentina. Rusia espera contar con el apoyo de sus socios internacionales en el marco de las plataformas multilaterales para establecer barreras fiables al desvío de las armas y equipo militar «ucranianos» a los manos de agentes no estatales”.