“Con 8,4% de inflación no puede hablar más. Ahí se acaba toda discusión. Una vergüenza”, lanzó el jefe de Gobierno porteño.
En esa línea, el precandidato presidencial continuó: “Los argentinos que no pueden ir al supermercado, la angustia de tener que cambiar la calidad de los alimentos, que no pueden darse el más mínimo gusto, que no pueden comprar útiles para la escuela. Esa es la realidad del país que gobiernan Alberto Fernández y Cristina Kirchner, que fracasaron”.
Los dardos al mandatario llegaron después de que Fernández atacara el lunes desde La Pampa a los socios de Juntos por el Cambio (JxC), cuando dijo que quieren solucionar problemas que ellos mismos crearon.
“El Presidente me da vergüenza. Con 8,4% de inflación no puede hablar más. Se acaba toda discusión. Es una vergüenza que los argentinos no puedan ir al supermercado, que cada vez compren menos, que tengan la angustia de tener que cambiar la calidad de los alimentos, las familias que no pueden darse el más mínimo gusto como un helado… Esa es la realidad del país que gobiernan Alberto Fernández y Cristina Kirchner”, marcó Rodríguez Larreta.
El funcionario porteño se mostró tajante también al referirse a la forma en que abordará los piquetes en caso de ser elegido para el sillón de Rivadavia, luego de que el lunes estuviera cuatro horas cortada la Autopista Riccheri por una protesta que hicieron vecinos enojados con oficiales de la Policía Bonaerense que según sus versiones les robaron dinero cuando los allanaron.
“Una manifestación de 30, 40, 50 personas no la vamos a permitir cuando yo sea presidente. 40 personas que complican la vida a millones de argentinos”, sostuvo el jefe de Gobierno.
Dirigió además un mensaje al frente interno cuando diferenció esto con las marchas multitudinarias que se dan en el centro, ya que este es uno de los puntos que le reclama el ala dura de Juntos por el Cambio (JxC), donde algunos dirigentes lo acusan de ser demasiado permisivo con estas protestas que dificultan la movilidad por la Ciudad. “Una cosa es eso lo de la Riccheri y otra, cuando tenés una manifestación de 20 o 30 mil personas en la 9 de Julio”, contrastó.
Sin embargo, prometió, como otras veces, que el 10 de diciembre quitará la intermediación de los dirigentes sociales en los planes. “Las organizaciones generan estas movilizaciones y tienen el poder de extorsionar”, dijo al respecto.