La jura de los nuevos diputados, programada para el próximo 10 de diciembre, comenzó con una jornada marcada por un ambiente de tensión y expectativas. La llegada del presidente Javier Milei, acompañado de su hermana Karina y otros miembros de su gabinete, generó revuelo en los pasillos del Congreso, que se encontraron bloqueados por el personal de seguridad. Esto convirtió el acceso en un desafío para muchos legisladores que quedaron encerrados o sin poder usar los ascensores reservados para los miembros del Ejecutivo.
La aparición de Milei en el palco presidencial desató un gran aplauso por parte de sus seguidores. “Presidente, Presidente”, gritaban los legisladores del bloque La Libertad Avanza (LLA), mostrando el apoyo firme hacia el nuevo mandatario. Sin embargo, esta emoción se tornó rápidamente en confrontación cuando el diputado peronista Aldo Leiva interrumpió desde su banca: “Presidente, la Patria no se vende”. La respuesta de los libertarios fue inmediata: “Libertad, libertad”.
El intercambio de chicanas continuó durante toda la sesión. Mientras los diputados de la izquierda, Nicolás del Caño y Romina del Pla, inauguraban la tanda de juras, el “show” se intensificó. Lilia Lemoine, ubicada en el recinto, hostigó a varios miembros de la oposición con gritos como “Andá a bañarte”, dirigidos a Del Caño, quien respondió visiblemente enfadado y señaló a la “represora” Patricia Bullrich.
La jornada fue testigo de situaciones tensas, como el cruce entre la diputada del peronismo Marita Velázquez y Lemoine, que culminó en un intercambio de fuertes palabras. En este clima, varios legisladores del peronismo juraron “por la libertad de Cristina Kirchner”, lo que generó aún más controversia. El dirigente Juan Grabois destacó en este contexto, girando sobre sus talones hacia el palco de Milei y levantando su brazo izquierdo, emulando un saludo de la película “Los Juegos del Hambre”.
Grabois, al realizar su juramento, cerró su puño y terminó con los dedos en “V”. Mientras se retiraba, hizo una seña que algunos interpretaron como una referencia a actitudes cuestionables. Aunque muchos pensaron que iba dirigido a Lorena Villaverde, quien tiene un pasado relacionado con el narcotráfico, en realidad mira a Juliana Santillán.
Insólito exabrupto de un diputado en la jura: “¡Qué buena que está!#diputados #jura #exabrupto pic.twitter.com/huY9tWkuc2
— Minuto YA ! (@MinutoYa) December 3, 2025
En medio de todo, Paula Penacca, diputada kirchnerista, pidió al presidente de la Cámara, el radical Gerardo Cipolini, que “controle” a los miembros de La Libertad Avanza (LLA) cuando durante la jura de Jorge Taiana alguien gritó “viejo tira bombas”. Fragmentos de la sesión mostraron cómo el bloque libertario estaba menos reprimido a la hora de hacer valer su número, recibiendo reconocimientos por su cohesión y organización.
Las interacciones entre los diputados dejaron en evidencia un ambiente cargado de rivalidades, donde las alianzas y las tensiones se palpaban en cada grito y aplauso. Así, la jura en Diputados no solo se limitó a un acto formal, sino que se transformó en una verdadera batalla escénica donde la política argentina mostró su faceta más visceral, un anticipo del clima que se vivirá en los próximos meses en el Congreso.