La inflación de mayo se ubicó en 1,5%, según informó este jueves el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). Se trató del índice más bajo de los últimos cinco años, en un contexto de marcada desaceleración que también alcanzó a la variación núcleo, que fue del 2,2%, y a los precios regulados, que subieron 1,3%. Las categorías estacionales, en cambio, mostraron una caída del 2,7%.
Si se excluye el efecto excepcional de los primeros meses de la pandemia, la variación mensual de mayo fue la más baja desde noviembre de 2017. En términos interanuales, el índice general avanzó 43,5%, el menor incremento desde marzo de 2021. De esta forma, se acumularon trece meses consecutivos de desaceleración en la medición contra igual mes del año anterior.
La inflación acumulada entre enero y mayo alcanzó el 13,3%, la más baja para ese período desde 2020. Por su parte, la media móvil de seis meses —indicador utilizado para seguir la tendencia general— descendió a su nivel más bajo desde octubre de 2020.
Además, la Canasta Básica Alimentaria retrocedió 0,4% en mayo y la Canasta Básica Total aumentó apenas 0,1%. Ambas variaciones mensuales fueron las más bajas desde el inicio de sus respectivas series estadísticas en 2016.
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Los precios al consumidor (#IPC) aumentaron 1,5% en mayo de 2025 respecto de abril y 43,5% interanual https://t.co/NWb2ZwjsSH pic.twitter.com/1uATUEqG9k— INDEC Argentina (@INDECArgentina) June 12, 2025
Cuáles fueron las estimaciones del IPC de mayo
Según el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central, la mediana de las proyecciones de 42 consultoras, centros de investigación y bancos ubicaba la inflación de mayo en el 2,1%.
EcoGo había estimado una inflación general del 1,9%, explicada en parte por una variación moderada en carnes (2,3%) y una baja del 6% en frutas, atribuida a la mejora de las condiciones climáticas. También destacaron el impacto de la eliminación de aranceles e impuestos internos para productos como celulares y aires acondicionados.
Desde C&T Asesores, la proyección era aún menor, del 1,8%. Argumentaban que el “Hot Sale” arrastró a la baja precios en rubros como electrodomésticos, indumentaria y productos del hogar. Además, mencionaban que “la falta de ajuste en el salario del servicio doméstico favoreció también a este último rubro”.
A pesar de la desaceleración, algunos sectores continuaban mostrando aumentos. Educación fue el segundo rubro con mayor alza, impulsado por el costo de los colegios, mientras que Salud ocupó el tercer lugar debido a los aumentos en las prepagas.