Cuatro años después de que Ezequiel Demonty fuera hallado muerto ahogado, sus familiares y amigos harán el jueves 21 una vigilia frente a la comisaría 34º, a la que pertenecían los nueve policías que golpearon y obligaron al joven a tirarse al Riachuelo.
"Queremos que permanezca en la memoria y no se olvide el brutal asesinato cometido por nueve policías en 2002", explicaron los organizadores de la concentración, que comenzará a las 8 en Quilmas 456 y terminará a las 11:30 cuando marchen al lugar donde encontraron muerto al joven, 27 de Febrero y Agustín de Vedia, ribera norte del Riachuelo, donde arrojarán flores.
Ezequiel fue detenido ilegalmente el 14 de septiembre y su cuerpo apareció flotando en el Riachuelo siete días más tarde. El hecho generó un escándalo político debido a la inacción estatal ante las múltiples denuncias de maltrato policial contra los pobres.
Tras el juicio, la familia y amigos de Demonty formó una asociación civil que se ocupa -entre otras cosas- de rescatar chicos adictos a la pasta base. Dolores, madre de Ezequiel, lideró recientemente un grupo de familiares que cuestionaron el endurecimiento de las penas a los menores como herramienta para combatir la inseguridad.