Las exportaciones de carne bovina refrigerada y congelada mostraron en noviembre de 2025 una tendencia variada: experimentaron una disminución en el volumen embarcado, pero un notable aumento en los ingresos de divisas. Según el informe mensual del Consorcio de Exportadores de Carnes Argentinas (ABC), en noviembre se exportaron alrededor de 64,5 mil toneladas peso producto, con un valor cercano a los US$ 365,6 millones.
En este escenario, China se ratifica una vez más como el principal destino de las exportaciones cárnicas argentinas, absorbiendo aproximadamente el 75% del volumen total despachado. El gigante asiático continúa liderando el podio debido a su demanda incesante de cortes destinados principalmente a procesos industriales y consumo masivo. No obstante, los analistas advierten que, si bien las cantidades enviadas son récord, el valor promedio por tonelada ha sufrido presiones a la baja, lo que obliga a los exportadores a optimizar sus márgenes operativos.
Más allá del predominio chino, el reporte destaca la importancia de otros mercados de alto valor que permiten equilibrar la balanza comercial del sector. La Unión Europea se mantiene como un comprador clave para los cortes premium bajo la Cuota Hilton, mientras que Israel y Estados Unidos muestran una participación estable. La diversificación de destinos aparece como el gran objetivo de la industria para reducir la dependencia de un solo comprador y capturar mejores precios en nichos específicos de consumo de alta calidad.
El precio internacional de la carne (cuota) siempre anduvo en 5 USD. Acá estaba en 1,20 y pisado. La cadena productiva estaba hecha mierda. Hoy el kilo vivo está en 2,90, sigue siendo bajo pero el mercado regula hacia abajo porque se permite exportar las pulpas.
— Belisario Allende (@hartopillo) December 22, 2025
Desde el sector frigorífico señalan que el actual esquema cambiario y la eliminación de ciertas restricciones a la exportación han favorecido la competitividad argentina en el mundo. Sin embargo, persisten desafíos logísticos y de costos internos que condicionan el potencial máximo de la actividad. “El desafío para el próximo año será mantener estos niveles de volumen mientras se trabaja en la apertura de nuevos mercados en el sudeste asiático”, indicaron fuentes de la industria cárnica consultadas sobre el desempeño del rubro.
En cuanto a la composición de los envíos, la carne congelada sin hueso sigue siendo el producto estrella, representando la mayor parte de las toneladas enviadas a Asia. Por otro lado, los cortes enfriados mantienen su vigencia en el mercado europeo, donde la trazabilidad y los estándares de sostenibilidad cobran cada vez más relevancia. Esta dualidad productiva permite que Argentina compita tanto en los segmentos de volumen como en los de valor agregado, consolidando su prestigio global.
Hacia el cierre del año, las perspectivas son optimistas, proyectando que el sector cerrará uno de los mejores periodos de la última década en términos de tonelaje exportado. El sostenimiento de la demanda china y la recuperación paulatina de los precios internacionales serán factores determinantes para definir el ingreso real de dólares en 2026.
