Desde la Casa Blanca, el mandatario declaró que “Estados Unidos ha ganado mucho dinero con la elección”. Con esta frase, aludió al desempeño de los mercados ante el resultado electoral argentino y sugirió que el triunfo oficialista favorece intereses norteamericanos.
Trump apuntó concretamente al comportamiento de los bonos soberanos del país sudamericano: “Los bonos han subido, la calificación de la deuda ha subido”. De esta manera vinculó el resultado electoral con una mejora de la percepción internacional sobre la economía argentina.
Donald Trump se felicita a sí mismo por la victoria de Milei
“Le di mucha ayuda. Le di un fuerte respaldo, mucha ayuda. Estamos obteniendo un FUERTE MANEJO de América del Sur”
País manejado a control remoto por el yanki anaranjado este pic.twitter.com/Rbu55bN0mk— Arrepentidos de Milei (@ArrepentidosLLA) October 27, 2025
La lectura oficial estadounidense interpreta que el respaldo popular a La Libertad Avanza (LLA) abre un escenario más favorable para la implementación de reformas económicas que podrían reducir riesgos financieros y cambiar la dinámica bilateral. Sin embargo, el comentario acerca de “ganar mucho dinero” no pasó desapercibido y generó críticas de sectores locales que lo interpretaron como un enfoque mercantil o estratégico por parte de Washington sobre la soberanía argentina.
Analistas advierten que, pese al optimismo expresado, “ganar dinero” no garantiza estabilidad ni crecimiento sostenible. En efecto, corregir desequilibrios estructurales requerirá más que una buena jornada financiera. El desafío para Argentina será traducir esta nueva fase política en reformas consistentes y confianza duradera.
La reacción de Trump marca un cambio simbólico en el vínculo entre ambos países. Si bien el tono es celebratorio por parte de EE.UU., la propuesta de fondo apunta a una cooperación más estrecha y a una serie de condicionantes económicos que podrían hacer eje central del futuro inmediato. El camino ya está definido: la clave será cómo se implemente y cuánto beneficie realmente al país anfitrión.




