Los incidentes de la ex línea Sarmiento en Castelar y Merlo, provincia de Buenos Aires, que tuvieron lugar hoy, despertaron distintas voces. Una de las que se hizo oír fue la del jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, quien reclamó al Gobierno de Cristina Kirchner que suspenda el proyecto de construcción del tren bala y que destine los fondos millonarios a realizar un programa de obras que mejore y recupere la red ferroviaria del área metropolitana.
"Los graves incidentes ocurridos hoy son una clara evidencia de que el transporte ferroviario de pasajeros se encuentra en situación de colapso", sostuvo el jefe Comunal, quien señaló que "es necesario que el Estado asuma la responsabilidad de garantizar un buen servicio a los ciudadanos, que cotidianamente sufren maltrato y falta de respeto, viajando hacinados o con demoras y cancelaciones".
Por otra parte, Macri manifestó su categórico repudio ante el uso de la violencia como forma de protesta ciudadana y deploró la posible presencia de activistas durante los incidentes.
