Cuatro años pasaron de aquella sesión en la que el macrismo propuso y consiguió la creación de nueve ministerios en el Poder Ejecutivo de la Ciudad. Hoy esa estructura le queda chica al PRO.
La elección pasó y, ahora sí, Mauricio Macri se anima a blanquear algo que desde hace meses se comenta en los pasillos de Bolívar 1: la gestación de más ministerios y los recambios de mando por apellidos ?más políticos?. ?Vamos a hacer algún cambio en el Gabinete?, reconoció el Jefe de Gobierno esta semana, luego de su resonante triunfo electoral.
La división del Ministerio de Justicia y Seguridad, la creación de los ministerios de Gobierno y de Tránsito y Transporte, el traspaso de la Subsecretaría de Atención Ciudadana con rango de Secretaría a la órbita de Espacio Público y nuevas responsabilidades a confirmar en diferentes y sensibles áreas son algunos de los cambios que se avecinan y que vienen con nombres propios.
Es que, envalentonado por los resultados electorales y ante la necesidad de construir un espacio más firme de cara a 2015, Macri introducirá a los principales referentes del armado nacional dentro de la estructura porteña para, desde allí, catapultar su candidatura a presidente de la Nación.
Tal como Noticias Urbanas lo anticipó a principios de junio, la partición del Ministerio de Justicia y Seguridad (Justicia por un lado y Seguridad por el otro) genera bastiones a pelear dentro de la estructura política del PRO. Sin embargo, se le respetaría la permanencia al ministro Guillermo Montenegro al mando de Seguridad y, con ello, de la Policía Metropolitana.
La incursión fuerte en Justicia la está llevando Daniel ?el Tano? Angelici, quien manifestó en varias reuniones su intención de ubicar allí a algún dirigente propio (Martín Ocampo o Sebastián De Stefano, de no prosperar su postulación como consejero de la Magistratura). Por su parte, José Torello también busca proponer a alguien que represente al ?puro macrismo?. Con menos chances pero expectante, el fiscal general Germán Garavano también estaría en esa compulsa, empujado por el peromacrista y auditor de la Ciudad, Santiago de Estrada.
De Estrada, justamente, es uno de los nombres que se manejaron para incorporar al Poder Ejecutivo, a pesar de la cerrada negativa del funcionario, quien se encuentra cómodo en la Auditoría.
Otra reforma que se plantea es la creación del Ministerio de Gobierno. Si bien en un principio se mencionó a De Estrada para conducirlo, ahora el elegido para esa área es el armador Emilio Monzó, un ex denarvaísta. En esa misma dependencia también estarían, como segundo, el actual legislador Álvaro González y el tucumano miembro de la mesa de ?armado nacional? Pablo Walter, hoy en el ministerio de Esteban Bullrich. Entre otras funciones, la cartera de Gobierno se encargaría de aceitar el enlace entre el Poder Ejecutivo y el Legislativo, además de la proyección nacional del ingeniero.
Por otra parte, Eduardo Macchiavelli, el dos larretista y titular de la Subsecretaría de Atención Ciudadana, podría mudarse como secretario de la misma cartera a la órbita del Ministerio de Ambiente y Espacio Público, en virtud de fortalecer el vínculo con la nueva y compleja estructura comunal.
En tanto, el ministro de Ambiente y Espacio Público, el peromacrista Diego Santilli, podría retomar un viejo anhelo y comandar la nueva estructura del Ministerio de Tránsito y Transporte, aunque allí deberá competir en desventaja con otro aspirante fuerte, Guillermo Dietrich. Siempre y cuando esa idea se haga realidad, algo que sigue en estudio. Lo seguro es que Ambiente y Espacio Público no existirá tal cual está hoy.
Actualmente hay varios ministerios que tienen entre sus responsabilidades temas vinculados con el tránsito y el transporte: en Desarrollo Urbano se encuentra la Subsecretaría de Transporte, a cargo de Dietrich; en Justicia y Seguridad ?dentro de la órbita de la Subsecretaría de Seguridad Urbana que encabeza Matías Molinero? están el Cuerpo de Agentes de Control de Tránsito y Transporte, la Dirección General de Licencias y la de Seguridad Vial, y bajo la orden del subsecretario de Justicia, Daniel Presti, la Administración de Infracciones.
Un área que ya se decidió que será ascendida es la que conduce Andrés Ibarra, que sumará a Recursos Humanos el proyecto de modernización del Estado. Turismo y Deportes tienen la misma escala ascendente, aunque eso no quiera decir en todos los casos nuevos ministerios, pero sí que se avanzará en la descentralización de funciones, generando unidades funcionales más pequeñas y manejables. Las prioritarias tendrán más presupuesto.
Otro ministerio que encararía cambios hacia una visión más política de la administración pública es el de Salud, para el que se busca proponer un ministro que tenga más y mejor diálogo con los gremios.
Para Desarrollo Social, en tanto, se decidió por estas horas que María Eugenia Vidal pueda seguir teniendo, al menos por un año, la titularidad del cargo, en virtud de conseguir un sucesor claro de las políticas de esa área. Quienes suenan para ocupar ese puesto en el futuro son Federico Salvai y su esposa, Carolina Stanley, y, con menos posibilidades, Soledad Acuña.
La nueva Vicejefatura de Gobierno a cargo de Vidal recuperaría, además, subsecretarías que tiempo atrás emigraron a la Jefatura de Gabinete, como la de Derechos Humanos.
La Secretaría General de Gobierno, a su vez, quedaría con el manejo de la comunicación y la vocería, mientras que la Jefatura de Gabinete incorporaría algunas nuevas funciones vinculadas con Espacio Público, Desarrollo Económico y Cultura.
Por último, Eugenio Burzaco, a cargo de la Policía Metropolitana, es otro de los ?jefes? que no resistiría el embate del cambio, aunque para reemplazarlo no sobran candidatos ni se han confirmado nombres.
El PRO buscará aprobar la modificación de la Ley de Ministerios antes del cambio legislativo, tras el cual, si bien poseerá dos legisladores propios más, también tendrá legisladores más opositores y una gran parte de ellos será K. La excusa formal para apurar las decisiones será la de ?evitar los engorros que implicaría hacer modificaciones al Presupuesto 2012?.
(actualización de la nota publicada el 1 de agosto)